Por Virginia Delgado
17 de junio de 2024Garantizar una atención médica adecuada a la población durante los meses de verano siempre es un desafío para las comunidades autónomas. Son ellas las que tienen la competencia de la gestión de la Sanidad en su territorio y, por tanto, las que regulan y organizan sus servicios sanitarios.
Todos los años, con la llegada de la época estival, se hacen necesarios planes estructurales para cubrir las vacaciones del personal médico y de enfermería, así como el incremento de la población por la llegada de turistas en determinadas zonas geográficas.
Hasta este año, los médicos residentes (MIR) de último año cubrían, en parte, esta necesidad porque finalizaban su periodo formativo en junio y se les contrataba. Sin embargo, en 2024, no podrá darse esta circunstancia, ya que no será hasta dentro de tres meses cuando concluyan su etapa formativa. Esto se debe a que esta promoción comenzó su formación en septiembre de 2020 (en vez de en junio), debido a la pandemia, y la finalizará concluido el verano.
Ante la imposibilidad de contratar a estos 5.000 jóvenes médicos MIR de cuarto año para cubrir las vacaciones de verano de los médicos, el Ministerio de Sanidad, al que la mayoría de comunidades del PP han acusado de “inacción” ante un problema que es competencia ministerial, recordó que los MIR de último año podían hacerse cargo de las consultas de Atención Primaria de forma autónoma, bajo supervisión de los centros docentes y sus responsables, durante un máximo de dos meses.
Algunas comunidades autónomas pidieron a Mónica García, ministra de Sanidad, que permitiera contratar a dichos MIR antes del verano, acortando su formación esas semanas, algo que, según García, se “sale de los límites de la legalidad”. Ante esa falta de consenso entre comunidades y Ministerio, cada gobierno autonómico hará frente a esta escasez de profesionales de diferentes formas:
La consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía anunció en mayo que estaba trabajando en el Plan de Verano, a través del cual contrataría a 32.000 profesionales de atención hospitalaria y primaria; 2.000 en mayo y octubre, y los otros 30.000 en los meses de verano. A día de hoy, no se ha confirmado esta medida y entidades como el Consejo Andaluz de Médicos se lamentan de que la consejera, Catalina García Carrasco, no haya respondido a las propuestas que le hicieron.
Aun así, desde el Servicio Andaluz de Salud (SAS) no prevén el cierre de centros de salud, pero ven probable la apertura de algunos sólo por la mañana en función a la demanda, como sucedió en Sevilla el año pasado.
El Gobierno de Aragón está a favor de adelantar la incorporación de MIR en periodo estival. Esta opción es voluntaria y los que acepten recibirán lo que se ha denominado un “complemento en reconocimiento”, además de un contrato de especialista en septiembre. El gobierno aragonés ha aclarado que los residentes “deberán realizar su función en centros docentes o habilitados para la tutorización por parte de un médico de familia”. Esta comunidad ha habilitado una web para que se inscriban los MIR interesados. A día de hoy, lo están casi la mitad y unos 10 que están realizando su formación fuera de Aragón.
Con esta medida, el consejero de Sanidad aragonés, José Luis Bancalero, ha manifestado que la planificación para los próximos meses “no va a ser tan agobiante”
Los hospitales del Principado cerrarán 360 camas durante el periodo estival, un 14% de las disponibles. La mayoría se producirán de forma progresiva a lo largo del mes de junio y hasta agosto. Según el sindicato de enfermería Satse, las 129 camas que no estarán disponibles en el área sanitaria de Oviedo se distribuirán entre el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y el Monte Naranco, mientras que en el área III (Avilés) se reducirán 70 en varias unidades del Hospital San Agustín. En la V (Gijón) habrá 57 menos en Cabueñes frente a las 56 del Hospital Valle del Nalón en el área VIII.
Por su parte, el sindicato médico Simpa ha calculado que para sustituir a los casi 1.200 médicos de Atención Primaria y urgencias que hay en la comunidad asturiana, podrían ser suficientes unos 400, ya que “un mismo facultativo podría cubrir el hueco de tres”.
La Comunidad Autónoma de Cantabria ha anunciado que entre 15 y 20 consultorios rurales no tendrán médico, al menos, una semana este verano. A los ayuntamientos afectados se les dará 300.000 euros para que los vecinos puedan trasladarse a otros centros en minibús, taxis u otros vehículos de transporte con conductor.
En cuanto al déficit de médicos, la Consejería de Salud cántabra ha informado de que se cubrirá, durante los meses de julio, agosto y septiembre, con la contratación de unos 10 médicos de otra comunidad autónoma, facultativos del mismo centro, profesionales de Urgencias cuando estén librando y con nuevas agendas médicas con facultativos sin cupo.
El director general de Recursos Humanos del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), Íñigo Cortázar, presentó hace unos días el plan de asistencia sanitaria de la Junta para este verano, que será similar al de los últimos nueve años.
En la comunidad castellanomanchega la situación de las bolsas de interinos hará posible que no se cierre ningún centro de salud en los meses estivales. También, los profesionales ya en plantilla sustituirán a los miembros de sus equipos en la actividad ordinaria o en otro horario, si es viable.
En los hospitales de Castilla y León no estarán operativas 459 camas; el 7,2% de las 6.308 que tienen los 14 hospitales de esa comunidad.
Por centros, este verano se cerrarán 113 camas en el hospital de León, 84 en el de Burgos, 69 en el de Salamanca, 59 en el de Palencia, 55 en el Clínico de Valladolid, 27 en el vallisoletano Río Hortega, 19 en el hospital de Ávila, 15 en el de Medina del Campo, 13 en el de Segovia, tres en el del Bierzo y dos en el de Zamora.
En el Plan de Contingencia Estival de Sanidad de Castilla y León se especifica que todos los centros de salud y consultorios estarán abiertos. También, que “por necesidades sobrevenidas ante la falta de personal se pondrá en marcha el transporte a la demanda para trasladar a los pacientes a los puntos de atención continuada”. Estos se reforzarán en los casos de mayor presión por desplazados en verano.
En cuanto a los contratos, se firmarán de forma voluntaria para que haya actividad por las tardes en los centros de salud. En cuanto a los de enfermería, se prevén unos 455 para unas 40.144 jornadas en estos centros; y otros 1.467 en los hospitales.
La Conselleria de Salud de la Generalitat de Catalunya prevé mantener abiertas 10.214 camas durante la primera quincena de julio (91% del total), 9.755 en la segunda (87%), 9.137 (81%) en agosto, 9.697 durante las dos primeras semanas de septiembre (86%) y 10.320 en la segunda quincena (92%).
En cuanto a los centros de atención primaria ubicados en las zonas turísticas y cercanas a la costa, tiene previsto reforzarlos con 252 profesionales. Sin embargo, a otros les ha llegado la orden, desde el Institut Català de la Salut (ICS), de no contratar personal sustituto para las vacaciones, y tampoco podrán prorrogar los contratos eventuales. Además, tendrán que cerrar los servicios de infecciones de transmisión sexual (ITS) y limitar la actividad de centros de atención continuada (CAC).
De hecho, la semana pasada se conoció que el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona cerrará 272 camas durante los meses de julio, agosto y septiembre. Esta medida se ha tomado después de que el centro recibiera indicaciones del ICS de no contratar personal de sustitución para verano y no renovar los contratos de los profesionales que comenzaron a trabajar en invierno. Aunque no es la primera vez que se produce cierre de camas, sí lo es de tales características (afecta al 24% del total del centro hospitalario, que cuenta con 1.146 camas).
Las huelgas que han tenido lugar en Ceuta y Melilla los últimos meses, reclamando mejoras en la sanidad, pueden volver a convocarse. Y es que la situación que se vive en las dos ciudades autónomas es complicada durante todo el año y se agudiza en verano, por la falta de profesionales.
Ceuta y Melilla son las únicas regiones que gestiona directamente el Ministerio de Sanidad a través de INGESA. Allí, hay menos de 400 médicos por cada cien mil habitantes. Por ello, son múltiples las reclamaciones que los sindicatos hacen al Ministerio de Sanidad.
El Sindicato Médico de Melilla ha denunciado "el deterioro de la sanidad pública melillense", a pesar de "la tregua" que dieron a la nueva ministra de Sanidad, Mónica García, paralizando a principios de año una huelga sanitaria en Ceuta y Melilla que alcanzaba los diez meses, la más larga de la historia sanitaria española.
A través de un comunicado, la organización sindical ha explicado que ofrecieron una paralización de las protestas a la nueva ministra de Sanidad "para que pudiese conocer la situación y tomar medidas urgentes que ayudasen a resolver las justas reivindicaciones que provocaron la huelga facultativa, pero meses después no se ha producido ningún avance". En este sentido, han destacado que Mónica García a diario habla sobre cómo debería gestionarse la sanidad pública, "mientras los territorios que dependen de ella colapsan". Por todo ello, el Sindicato Médico de Melilla ha pedido a la ministra de Sanidad "que deje de tomarnos el pelo, se reúna con los facultativos y aborde las soluciones ya". "Ante esta dejadez, los facultativos nos vemos abocados a decir basta, pues ni médicos ni pacientes nos merecemos este abandono y desprecio", han concluido.
La Conselleria de Sanidad de la Generalitat Valeciana ha anunciado que dispone de un presupuesto de 79,5 millones de euros para cubrir la asistencia sanitaria desde mediados de junio hasta el 30 de noviembre.
Estos fondos se invertirán en contratos de sustitución para cubrir al personal sanitario que esté de vacaciones y en contrataciones adicionales, que se realizarán para reforzar los centros de Atención Primaria y consultorios ubicados en zonas de mayor afluencia turística. Se prevén unas 8.600 contrataciones, un millar más que en 2023.
En cuanto a las medidas que llevará a cabo la Conselleria, reducirá horarios de atención en algunos centros, movilizará facultativos y ofrecerá incentivos, así como la posibilidad de que los médicos disfruten de sus vacaciones hasta el 30 de noviembre. En zonas turísticas de mayor afluencia, habrá acciones de refuerzo en 65 centros de atención sanitaria y se abrirán 20 consultorios auxiliares.
En lo relacionado a los MIR de último curso, la Generalitat permitirá que presten asistencia de forma tutorizada en su propio centro de salud u otro cercano, de forma voluntaria. No podrán hacer asistencia a domicilios ni atender emergencias sin estar acompañados.
El Gobierno extremeño también contará con médicos internos residentes de último año de formación durante los meses de verano. El Servicio Extremeño de Salud (SES) ha dado luz verde para que pasen consulta bajo la supervisión de un profesional de la misma especialidad y del mismo centro sanitario.
La Xunta de Galicia está ofreciendo a los MIR de último año la posibilidad de apoyar, con incentivos económicos y bajo supervisión, las urgencias y la atención primaria. Por otro lado, ha confirmado que un grupo de médicos se desplazará a las zonas donde falten facultativos o haya incremento de población. Siempre, de forma voluntaria y con un extra económico.
La Xunta está analizando, además, la posibilidad de que médicos que tengan una segunda residencia en zonas de costa, con mayor demanda asistencial en verano, puedan elegir trabajar allí de forma temporal.
El Sindicato Médico de Balears (SIMEBAL) prevé una falta de más de 150 médicos de Atención Primaria para este verano en las islas. Concretamente, unos 80 en Mallorca, 50 en Ibiza y 25 en Menorca.
El incremento de visitantes y la ampliación de la temporada turística (de mayo a octubre) provocan más presión en los servicios sanitarios insulares. La consejera de Salud, Manuela García Romero, ha informado de que se ha contratado personal adicional para atender a la población desplazada y cubrir las vacaciones de los sanitarios. Por otro lado, se han reforzado los Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP).
El plan para este verano del Servicio Canario de la Salud (SCS) incluye varias medidas. Por un lado, se contratarán a unos cien nuevos profesionales para cubrir los permisos vacacionales de sus compañeros, por otro, se ofrecerán prórrogas a los sanitarios de refuerzo cuyos contratos finalicen el 30 de junio y, por último, se propondrá la intensificación de jornada de manera voluntaria y mediante incentivos.
La Rioja no tiene previsto contratar personal médico de Atención Primaria este verano y abrirá todos los centros de salud durante los meses de julio y agosto.
Los facultativos han alertado de que habrá dificultad para cubrir las vacaciones, sobre todo en áreas rurales donde la población llega a multiplicarse en época estival. Ante ello, la Consejería de Salud riojana ha invitado a los MIR de último año a hacer guardias de forma voluntaria y supervisadas.
En enfermería sí habrá contrataciones los meses de verano. El plan de La Rioja prevé 22 enfermeras nuevas de Atención Primaria, aunque quizá no se llegue a esta cifra por la escasez de personal.
De cara al verano, en la Comunidad de Madrid, hay un déficit de 212 profesionales sanitarios para cubrir las consultas de Medicina Familiar y Comunitaria.
La Consejería de Sanidad ha informado de que ya ha diseñado su plan de contingencia que asegurará que el servicio asistencial se preste con normalidad. Sus portavoces han manifestado que, en los hospitales y en los centros de salud, van a distribuir los recursos necesarios, con turnos deslizantes, reforzando la contratación de personal y aumentando la retribución de las horas extra.
Respecto a la contratación de los MIR de último año, la consejera, Fátima Matute, ha señalado que “el Gobierno autonómico no los utilizará para sustituir a los médicos y así hacer frente a la falta de profesionales en verano”.
El Servicio Murciano de Salud (SMS) ha solicitado a los profesionales sanitarios de los hospitales de la región de Murcia que limiten a dos semanas sus vacaciones de verano. Una medida que ha causado malestar entre este colectivo al considerarlo una imposición.
Los sindicatos sanitarios han exigido al SMS que busque otras soluciones, como la contratación de profesionales temporales o incentivos para que los médicos acepten tomar sus vacaciones fuera del periodo estival.
El consejero de Salud de Navarra, Fernando Domínguez, apoyó la opción de adelantar el final del periodo formativo de los MIR al mes de junio, para que puedan ser contratados en verano. No obstante, en la comunidad navarra no se ha avanzado en este tema y el sindicato médico denuncia que la Atención Primaria “está al límite”.
Respecto a las sustituciones en época estival, el déficit de médicos de familia que hay durante todo el año en los centros de salud hace difícil nuevas contrataciones en verano. Hay centros de salud, como el de Estella, que no abrirán por las tardes desde el 17 de junio hasta el 13 de septiembre.
Por otro lado, se ha hecho público que el Servicio de Urgencias de Complejo Hospitalario de Navarra (CHN) ha cubierto las 10 plazas de médicos previstas para atender las necesidades de personal durante los tres próximos meses.
Osakidetza-Servicio Vasco de Salud cuenta con 339 centros de salud de Atención Primaria. Su previsión hasta el 27 de septiembre es que 155 mantengan sus jornadas, 72 adelanten el horario de cierre (de 20h. a 17h.), 44 no abran algunos días y los 10 que sólo atienden una hora a la semana cierren toda la temporada estival. En cuanto a los 58 consultorios restantes, se desconoce su planificación.