Por Virginia Delgado
21 de octubre de 2025Un estudio liderado por Amy Berrington de González, científica y profesora del Clinical Epidemiology en el Institute of Cancer Research de Londres (Inglaterra), ha concluido que la incidencia de los cánceres de tiroides, mama, colorrectal, riñón, endometrio y leucemia aumentó en los más jóvenes de 42 países entre los años 2003 y 2017.
El equipo de investigadores llegó a esta conclusión después de utilizar la base de datos de la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) “GLOBOCAN”, que incluye gran cantidad de datos de diagnósticos y representa a países de los cinco continentes.
La particularidad del estudio, publicado en Annals of Internal Medicine, es que evaluó si la incidencia de 13 tipos de cáncer cambiaba por igual en los jóvenes de entre 20 y 49 años que en los mayores de 50. Así, comprobaron que, excepto en el colorrectal, en los de tiroides, mama, colorrectal, riñón, endometrio y leucemia también creció en los adultos. Además, se percataron de que estaban relacionados con la obesidad.
J. Alejandro Pérez-Fidalgo, médico adjunto del servicio de Oncología y Hematología del Instituto de Investigación Sanitaria Clínico Valencia (INCLIVA) del Hospital Clínico Universitario de Valencia ha manifestado a SMC España que este incremento tiene importantes consecuencias sociales, sanitarias y demográficas. “El manejo de un diagnóstico de cáncer entre las personas más jóvenes supone un impacto en su desarrollo social, personal y familiar, con consecuencias también de incremento en las toxicidades más tardías. Las administraciones sanitarias deberán adaptarse y plantear programas de desarrollo para establecer estrategias tanto de manejo de esta población más joven, dado que tiene unas necesidades más específicas, como de seguimiento posterior y control de toxicidades tardías”, ha manifestado.
Asimismo, ha recordado que la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), en colaboración con otras entidades como las de Medicina Primaria, Radioterapia, Cardiología y Hematología, ha desarrollado un documento de consenso para guiar a los profesionales en el control y seguimiento de los largos supervivientes de este rango de edad.