Por Medicina Responsable
2 de junio de 2025Investigadores del Hospital Universitario Vall d´Hebron de Barcelona han demostrado, durante el Congreso de la Sociedad Americana de Oncología Médica (ASCO) que se celebra del 30 al 4 de junio en Chicago, que una nueva terapia contra el cáncer colorrectal metastásico, uno de los más letales, es capaz de duplicar la supervivencia en pacientes. Además, el estudio se ha publicado en la revista The New England Journal of Medicine.
Esta nueva terapia se basa en la combinación de encorafenibib y cetuximab con quimioterapia frente al tratamiento estándar en pacientes con cáncer colorrectal metastásico con mutación en el gen BRAF V600E que no habían sido tratados previamente. “Los resultados de esta estrategia terapéutica en primera línea presentan beneficios sin precedentes, lo que supondrá un cambio radical en el pronóstico de esta población de pacientes”, explica la doctora Elena Élez, oncóloga del Hospital Universitario Vall d´Hebron y jefa del Grupo del Cáncer Colorrectal del VHIO (Instituto de Oncología del Vall d´Hebron), y quien ha liderado el estudio. Junto a ella, han codirigido el ensayo el jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Vall d’Hebron y director del VHIO, Josep Tabernero, y Scott Kopetz, del MD Anderson Cancer Center de Texas.
El ensayo clínico de fase 3 BREAKWATER ha involucrado a 637 pacientes que recibieron de forma aleatoria la combinación de ambos fármacos con el esquema mFOLFOX6 (un tipo de quimioterapia que incluye leucovorina cálcica, fluorouracilo y oxaliplatino). “Se observa un beneficio estadística y clínicamente significativo en la supervivencia global con la combinación experimental, que duplica la alcanzada con el tratamiento estándar. La media de supervivencia global fue de 30,3 meses en los pacientes tratados con encorafenib y cetuximab y quimioterapia frente a los 15,1 meses en los pacientes tratados con el estándar”, afirma la Dra. Elena Élez.
Además, se observaron mejoras en la supervivencia libre de progresión, es decir el tiempo que tarda en evolucionar el tumor después del inicio del tratamiento. Este fue de 12,8 meses de media en los pacientes tratados con la nueva terapia frente a los 7,1 meses en los tratados con el estándar. El tratamiento experimental también mostró una reducción del 47% en el riesgo de progresión de la enfermedad o muerte y una disminución del 51% en el riesgo de muerte en comparación con el estándar.
Este tipo de cáncer es el tercer tumor más diagnosticado en el mundo y la segunda causa de muerte por cáncer en Europa. De hecho, entre un 20 y un 30% de los pacientes ya presentan metástasis en el momento del diagnóstico, y un 50% terminan siendo metastásicos durante la evolución de la enfermedad.
Se produce cuando las células cancerosas se propagan desde el colon o el recto a otros órganos del cuerpo, y la metástasis suele afectar al hígado, los pulmones, los huesos o la cavidad abdominal. Además, es complicado dar con su diagnóstico ya que las células cancerosas son demasiado pequeñas para ser detectadas y extirpadas.
Aunque sus tratamientos han ido cambiando y evolucionando a lo largo de los años, este siempre está marcado por factores individuales de cada paciente como el estado y la fase del tumor, su localización y el número de metástasis. Es habitual que se administra quimioterapia de forma oral o intravenosa, o se lleve a cabo una cirugía para tratar esta enfermedad. Sin embargo, tras los nuevos descubrimientos el tratamiento del cáncer colorrectal podría cambiar de manera radical.