Por Juan García
13 de septiembre de 2024La aprobación de las guías clínicas para la prescripción de productos sanitarios y medicamentos por parte de enfermeras ha dado lugar a un choque entre algunos profesionales y representantes de los médicos y el colectivo de enfermería. La polémica ha ganado fuerza en estos días tras la entrada en vigor de la última de estas guías, relativa al tratamiento de infecciones de orina en casos leves por parte de las enfermeras.
El último capítulo de este cruce de declaraciones entre sindicatos y asociaciones de médicos y enfermeras lo protagonizó ayer el Consejo General de Enfermería (CGE), que anunció acciones legales contra las “injurias de los representantes de la profesión médica”. En este sentido, el presidente de la Asociación Nacional de Directivos de Enfermería (ANDE), Jesús Sanz, ha mostrado su apoyo a la decisión del CGE. “Desde ANDE no entendemos en absoluto esta polémica”, señala Sanz a Medicina Responsable. En este sentido, critica las declaraciones que hablan de la “búsqueda de la seguridad del paciente” y las tilda de “demagógicas”. “Muchas de las manifestaciones que se han hecho no tienen ningún sentido, hay un desconocimiento de la legislación y de la realidad del momento asistencial”, apunta.
Entre estas manifestaciones se encuentran la del representante de los médicos en Castilla y León, el doctor José Luis Díaz Villarig, quien fue criticado por el CGE por anunciar que estas guías clínicas no iban a llegar a implantarse en esa comunidad. Además, el propio Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) anunció que recurrirá la guía sobre las infecciones de orina.
A su juicio, estas críticas obedecen a “planteamientos corporativistas que no representan un sentimiento común ni generalizado entre la profesión médica”. Así, Jesús Sanz pone el acento en el hecho de que estas guías han sido redactadas por “equipos multidisciplinares” en los que también han intervenido representantes de los médicos. Además, señala que “la polémica no se ha originado ahora” y recuerda casos anteriores “en algunas comunidades autónomas en los que estos profesionales han impugnado que una enfermera pueda ser directora de un centro de salud”. “Está claro que una enfermera no va a dirigir el proceso asistencial médico, pero no tienen ningún problema en que un economista sea gerente y sí con una enfermera”, comenta.
El presidente de ANDE defiende que las enfermeras tienen a día de hoy “los conocimientos y las capacidades necesarias para asumir estas competencias” y que no supone una intromisión en las competencias de los médicos. Además, precisa que estas guías limitan las nuevas competencias a ámbitos "muy concretos y delimitados". “Las enfermeras estudian un grado universitario en el que cursan farmacología en prácticamente todos los planes de estudio. Hay enfermeras que han hecho otro tipo de formación continuada y, sobre todo, hay que señalar que no estamos hablando de la misma capacidad prescriptora que tiene un médico”, apunta.
Este desarrollo competencial del colectivo de enfermería considera que va a “agilizar la atención al paciente y facilitar la continuidad para unos cuidados de más calidad y más rápidos”.
Para Sanz, “en el ámbito de las profesiones y especialidades sanitarias la frontera entre las competencias es muy difusa”. Por eso considera que “las peleas competenciales entre profesionales sanitarios no tienen ningún sentido” y llama a buscar los “espacios de encuentro” a través del diálogo para garantizar “una atención de calidad a los pacientes”.
El presidente de ANDE señala que “aunque puede haber profesionales que no trabajen de manera activa por un proceso asistencial integrado y multidisciplinar, en la práctica, cuando médicos y enfermeros trabajan conjuntamente para poner sobre la mesa los intereses del paciente, la dinámica y la relación se desarrolla muy satisfactoriamente”.