Por Andrea Martín
20 de noviembre de 2023Investigadores de la Facultad de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania y el Centro Médico CMC VA (CMCVAMC), en Estados Unidos, han desarrollado un “parche biológico” que se activa con el movimiento natural de una persona. Esto podría ser la clave para reparar las hernias de disco en la espalda.
La hernia discal es una enfermedad que ocurre cuando uno de los discos que se encuentran entre las vértebras de la columna se desplaza hacia la raíz nerviosa y la presiona. Los discos tienen como misión distribuir las cargas y las presiones que soporta la columna, pero cuando estos sufren esta patología no pueden realizar su función y provocan un intenso dolor. “Es como si un neumático se hubiera desinflado y el automóvil se desplazará sobre su llanta”, explica el coautor del estudio Robert Mauck. “Actualmente no existe ningún tratamiento curativo para la hernia de disco. Lo mejor que se puede hacer en estos casos es como meter un tapón de goma en el agujero de un neumático. Permanecerá por un tiempo, pero no será un gran sello”. Por ello, los investigadores han desarrollado un parche, no solo para tapar el agujero, sino también para permitir que la tensión se acumule nuevamente y vuelva a amortiguar las vértebras.
Según el estudio, publicado en la revista “Science Translational Medicine” y realizado en animales, los “parches de reparación activados por tensión” proporcionan una liberación controlada de una molécula antiinflamatoria llamada anakinra a partir de microcápsulas a lo largo del tiempo. De esta manera, se proporciona una ayuda en los discos para recuperar la tensión que necesitan y así revertir la hernia y prevenir una mayor degeneración. “Nosotros lo que hemos desarrollado es un tapón más pegado que se activa con el movimiento. De esta manera, hace que se selle con más fuerza. Siguiendo la analogía de los automóviles, es como si el parche del neumático se hiciera más fuerte cuantos más kilómetros lo recorres”.
De acuerdo con los investigadores, "esto está diseñado para ser una intervención temprana que puede cambiar el curso de la progresión de la enfermedad", comenta el coautor principal Harvey Smith, profesor asociado de Cirugía Ortopédica. “Como no existe un tratamiento para mitigar las hernias recurrentes, buscamos proporcionar una solución. Estamos ante una enfermedad que es muy común en personas más jóvenes en edad laboral y que, posteriormente, conduce a una enfermedad discal grave y a la necesidad de una fusión espinal. Cuanto más podamos prevenir eso, mejor”.