Por Pedro Martínez
20 de marzo de 2025Las previsiones de la Sociedad Española de Alergología o Inmunología Clínica (SEAIC) apuntan a que este año, debido a las temperaturas tan altas que se han registrado al inicio de 2025 y la gran cantidad de precipitaciones que ha habido en los meses de febrero y marzo, el polen se mantenga más tiempo en el ambiente, lo que puede provocar que los síntomas de la alergia sean más persistentes.
Las mismas previsiones también apuntan a que la temporada de alergias al polen se adelantará este año, con picos "inminentes", y afectará en mayor medida a la región de Extremadura, el norte de Andalucía, Castilla y León, en algunos puntos de Castilla-La Mancha y la Comunidad de Madrid, donde las personas alérgicas se enfrentarán a una primavera moderada o intensa.
Badajoz, Cáceres, Sevilla y Jaén serán las provincias más afectadas por la llegada del polen este año (16.000-19.000 granos de polen por m/3). Por ello, el doctor Juan José Zapata, presidente del Comité de Aerobiología Clínica (SEAIC), advierte de que “las personas que se encuentren en estas zonas y que tengan unas patologías previas pueden sufrir una sobre afectación ya que los niveles habituales de estas zonas no superan los 8.000 gramos por m/3”. Por otro lado, Toledo y Ciudad Real serán las más afectadas en el centro peninsular, registrando alrededor de 6.000 granos por m/3). Finalmente, Vitoria será la zona de la cornisa cantábrica más afectada por la llegada del polen, pudiendo registrar hasta 5.200 granos por m/3. El resto de las provincias españolas tendrán una primavera leve o moderada en lo que se refiere a la cantidad de polen en el aire.
En España se calcula que el 20% de la población padece algún tipo de alergia relacionada con el polen. Por ello, la SEAIC, publica todos los años una predicción de cómo será la afección de las alergias en las diferentes zonas de España. La doctora Arantza Vega, presidenta de la SEAIC, explica que “en cuanto se observen síntomas de alergia, es necesario que el paciente acuda a su médico de atención primaria para que le recete el tratamiento adecuado y le derive al alergólogo especialista pertinente”. Las alergias al polen pueden ser mitigadas con medicamentos como los antihistamínicos, pero, “la inmunoterapia es lo único que puede hacer que un paciente alérgico a pólenes se cure y elimine sus síntomas”.
El impacto del cambio climático en las enfermedades alérgicas es cada vez más evidente. Informes recientes señalan que el incremento de las temperaturas podría ocasionar un aumento en la producción polínica y en la cantidad de alérgenos de los granos de polen, extendiendo, además, la duración de las estaciones polínicas. Este fenómeno agrava síntomas en personas alérgicas y favorece la aparición de nuevas sensibilizaciones en la población general.
El doctor Darío Antolín, vicepresidente de la SEAIC y miembro del Grupo de Trabajo de Alergia sobre Medio Ambiente, Contaminación y Cambio Climático explica que “estamos viendo cómo los cambios en el clima están generando un entorno más hostil para los pacientes alérgicos. Las temporadas de polen no solo son más largas, sino que los niveles son más elevados, lo que agrava los síntomas de los pacientes alérgicos”.