Por Medicina Responsable
3 de julio de 2024La combinación de farmacoterapia con intervenciones conductuales aumenta significativamente las tasas de éxito en el abandono del hábito tabaquico. Así lo señala la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ha publicado la primera guía de tratamiento clínico para dejar de fumar cigarrillos, pipas de agua, productos de tabaco sin humo, puros, tabaco para liar y productos de tabaco calentados.
La guía recomienda un conjunto integral de acciones que van desde intervenciones digitales a tratamientos e intervenciones terapéuticas. Concretamente, recomienda intervenciones conductuales, como el asesoramiento breve -de al menos 3 minutos, ofrecido de forma sistemática en los centros de atención de salud-, junto con un apoyo conductual más intensivo -que se base en asesoramiento individual, grupal o telefónico- para los usuarios interesados.
En cuanto a los tratamientos farmacológicos, recomienda la vareniclina, la terapia de reemplazo de nicotina (TRN), el bupropión y la citisina como tratamientos eficaces para dejar de fumar. Además, en abril de 2024, los chicles y parches de nicotina de Kenvue se convirtieron en los primeros productos de terapia de reemplazo de nicotina precalificados por la OMS.
Además, aconseja intervenciones digitales como mensajes de texto, aplicaciones para teléfonos inteligentes y programas de Internet como complementos o herramientas de autogestión.
La guía se centra en ayudar a más de 750 millones de consumidores de tabaco que desean dejar todas las formas de tabaco, ya que más del 60% de los 1.250 millones de fumadores de desean dejar de fumar, pero el 70% carece de acceso a servicios eficaces para dejar de fumar. "Esta directriz marca un hito crucial en nuestra batalla mundial contra estos productos peligrosos. Proporciona a los países las herramientas esenciales para ayudar eficazmente a las personas a dejar de fumar y aliviar la carga mundial de enfermedades relacionadas con el tabaco", afirma el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS
"No se puede exagerar la importancia de la inmensa lucha que afrontan las personas que intentan dejar de fumar. Debemos valorar profundamente la fuerza que se necesita y el sufrimiento que soportan las personas y sus seres queridos para superar esta adicción", concluye Rüdiger Krech, director de Promoción de la Salud de la OMS.
Noticias relacionadas
Allan Sam: "Mucha gente tiene problemas de salud asociados al tabaco, pero no lo sabe"
El jefe del Servicio de Neumología de MD Anderson Cancer Center Madrid, habla sobre los efectos del tabaco en la población y los nuevos dispositivos electrónicos
Así mata el tabaco
Cada año mueren en España 50.000 personas por causas atribuibles al tabaco
Si quiere morir 10 años antes... no deje de fumar
En Estados Unidos calculan que un fumador llega a acortar su vida 13 años. Pongámonos en el estudio más optimista, y supongamos que son sólo 10 años.
