Los niños españoles consumen más del doble de azúcar recomendado por la OMS

Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Granada ha revelado que el consumo medio de azúcares añadidos en niños españoles se encuentra muy por encima de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que son 25 gramos al día. De hecho, consumen más del doble de azúcar del recomendado, 55,7 gramos al día.

A esto hay que añadir que más de la mitad del azúcar añadido, el 65%, procede de alimentos con baja densidad nutricional, mientras que  el 35% procede de una correcta densidad nutricional.

Los alimentos considerados de baja densidad nutricional son el azúcar blanco, mermeladas, salsas, golosinas, cacao en polvo, refrescos, helados, galletas, néctares de fruta, pastelería y bollería industrial, barras de chocolate, bizcochos y repostería casera y bebidas energéticas para deportistas. Por su parte, los alimentos de mayor densidad nutricional serían los postres lácteos, bebidas vegetales y yogures azucarados o saborizados, batidos envasados con al menos un 90% de leche, cereales de desayuno, que aportan en torno a un 6% de los azúcares, pero tienen una alta densidad nutricional, y leches infantiles enriquecidas. En este grupo, la leche, que es alimento más consumido por los niños españoles, estaría en el top de la lista, porque aporta proteínas de alto valor biológico, calcio, fósforo, magnesio, potasio, zinc, vitamina A, riboflavina y niacina, nutrientes esenciales para su etapa de desarrollo y crecimiento. Por el contrario, las galletas y el cacao en polvo, también consumidos con alta frecuencia (entre 4 y 6 veces a la semana), contienen más de 10,3 g/ración y 7,3g/ración de azúcares añadidos respectivamente, por lo que son los dos alimentos que mayor cantidad de azúcar aportan cada día a la dieta de los niños españoles y que menos aporte de nutrientes esenciales conlleva por su baja densidad nutricional.

Según los resultados del estudio, es muy llamativo que los padres tengan una percepción aceptable o buena sobre determinados alimentos con una densidad nutricional baja y que aportan alto contenido en azúcares añadidos por ración (por encima de 15 gramos por ración). Este es el caso de las bebidas energéticas o para deportistas, las barras de chocolate, los néctares de fruta, el cacao en polvo o los helados, que son percibidos por los padres como de calidad nutricional normal.

“Se debe concienciar a la población para disminuir el consumo de todos los productos que contienen azúcares añadidos, prioritariamente de aquellos con baja calidad nutricional. En el contexto de una dieta saludable y nutricionalmente adecuada, se podría mantener un consumo ocasional (1-2 raciones/semana) de productos con calidad nutricional baja, siempre que el contenido de azúcares añadidos sea bajo o moderado”, ha apuntado Jesús Francisco Rodríguez Huertas, director del estudio.

El estudio, realizado por el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INYTA), de la Universidad de Granada, ha contado con una muestra de 1.775 adultos con hijos de entre siete y 12 años. Los resultados han sido publicados en la revista Nutrients.  

 

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