Llega a España la ola de calor más sofocante y larga del verano

Ya está aquí la tercera ola de calor del verano que, según los expertos, se espera que sea la más larga y con las temperaturas más extremas de estos últimos meses. Una quincena de provincias de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Andalucía, la Comunidad de Madrid y Galicia se verán afectadas por temperaturas de hasta 44ºC, de acuerdo con la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), y de hasta 46ºC en regiones como Córdoba. En concreto, estarán en riesgo elevado Huelva, Jaén, Córdoba, Sevilla, Ciudad Real, Badajoz y Cáceres, mientras que otras zonas como Salamanca, Ávila, Toledo, Ourense, Madrid, Granada y Cádiz mantendrán un riesgo moderado. Esta ola de calor se prevé que se mantenga hasta el viernes 11 de agosto. 

Para no sufrir los efectos más negativos del calor, las autoridades sanitarias recomiendan evitar hacer deporte dentro de las horas más calurosas del día, es decir, desde las 12:00 hasta las 19:00, mantenerse bien hidratado y protegerse del sol. Además, también es aconsejable no abusar de bebidas alcohólicas con azúcar o cafeína, usar ropa ligera y que transpire, buscar lugares frescos, mantener los medicamentos en lugares frescos, hacer comidas ligeras y prestar especial atención a las personas mayores, niños y personas con patologías previas, que son el grupo más vulnerable. 

Aun así, los golpes de calor son una de las consecuencias más temidas de estos días, generalmente fruto de la exposición prolongada a las altas temperaturas. De acuerdo con el doctor Pedro Gargantilla, director médico de Medicina Responsable, cuando se sufre un golpe de calor el organismo alcanza temperaturas superiores a los 42ºC, lo que desencadena síntomas como dolor de cabeza, náuseas o mareos. La persona que lo padece también puede mostrar la piel enrojecida y caliente, la respiración y el pulso acelerado, convulsiones, alucinaciones, cambios en el comportamiento y desmayo. 

Otra de las consecuencias derivadas de las altas temperaturas puede ser el agotamiento por calor, que presenta síntomas más leves como vómitos, cansancio, sudoración, piel fría, pálida y húmeda, sudoración y fiebre menor a 40ºC. En este caso, hay que beber agua poco a poco, ir a un lugar fresco, aflojarse la ropa y aplicar paños húmedos o bañarse con agua fría. Si estos síntomas duran más de una hora, o se padecen enfermedades crónicas, hay que buscar atención médica.  

 

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