El 66% de las madres no ha pedido ayuda psicológica pese a sentir desbordamiento y tristeza

“Cuidarse es un derecho, no un privilegio”. Así lo afirma Laura Baena, presidenta de la Asociación Yo no Renuncio y fundadora del club Malasmadres, que reivindica la necesidad de autocuidado de las mujeres y sobre todo de las madres que “ven peligrar su salud mental por falta de tiempo para ellas”.

El 85% de las madres tienen menos de una hora libre al día, o ni siquiera alcanzan este tiempo, según el estudio “El coste de la conciliación”, realizado por la asociación Yo no renuncio, en el que participaron más de 50.000 mujeres. A este dato se unen las barreras que aún existen para dar el paso a pedir ayuda psicológica: la falta de dinero, la vergüenza y, una vez más, la falta de tiempo. De acuerdo con el estudio “La Hora de Cuidarse”, del Club de Malasmadres y la aseguradora DKV, el 66% de las mujeres reconoce que no ha pedido ayuda psicológica, pese a sentir desbordamiento y tristeza. Si seguimos ahondando en la salud mental materna de las mujeres observamos que el 50% de las mujeres encuestadas declara que se cuida mal o muy mal y el 40% cree que lo hace bien, aunque podría mejorar mucho. Tan solo un 10% de las mujeres encuestadas considera que su nivel de autocuidado es bueno.

Salud mental

Si atendemos al cuidado de la salud mental de las madres, ya sea a través de la meditación o de la desconexión, tan solo el 7% de las encuestadas medita y el 19% desconecta cuando queda con amigas. Otras prácticas mencionadas de forma espontánea y que tienen que ver con la concentración son aquellas relacionadas con el arte y la cultura (como leer, escribir o pintar). Como explica Laura Baena, “la maternidad es un momento de muchos cambios en los que se necesita apoyo, un apoyo que muchas mujeres no encuentran porque no tienen acceso a servicios que las ayuden. Tras la pandemia observamos el deterioro de la salud mental de las mujeres que son madres y decidimos dar un paso más”. Para eso, y junto a DKV, se activó el Teléfono Yo Me Cuido, para orientar a esas mujeres y “que encuentren un lugar seguro donde ser atendidas”.

Más de 400 mujeres han sido atendidas ya en este teléfono cuyas principales consultas están relacionadas con la necesidad de las madres de ser escuchadas, la orientación psicológica y la ansiedad personal. También se reciben consultas, aunque en menor medida, sobre conflictos familiares, acoso laboral, infancia y adolescencia, trastornos de la personalidad y detección de violencia de género.

 

 

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