Por Juan García
15 de octubre de 2024El secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, señaló ayer en su comparecencia en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados que el Ministerio tiene previsto sacar a la luz su anunciada reforma de la Ley de Garantías y Uso Racional de Medicamentos para el próximo mes de noviembre. Entre las novedades que presenta esta iniciativa, destaca la medida que permitirá que los farmacéuticos hagan sustituciones de fármacos, especialmente ante situaciones de problemas de abastecimiento.
"Va a ser una reforma ambiciosa que intentará modernizar y actualizar todo lo relacionado con la política farmacéutica de nuestro sistema", ha afirmado Padilla. En este sentido, apunta que se van a realizar modificaciones para que los farmacéuticos tengan la capacidad de sustitución de fármacos, "especialmente en contextos de problemas de suministro de determinados medicamentos”.
Para ilustrar el objetivo y alcance de esta medida, Padilla ha ejemplificado con casos en los que los pacientes se ven obligados a pasar por consulta de nuevo tras no encontrar el fármaco que tienen prescrito. "No sé si les ha pasado que le prescriben un medicamento y que en la farmacia les digan que no tienen cápsulas, pero tienen comprimidos, pero que no pueden hacer la sustitución, y tienen que ir otra vez al médico para que vuelva a recetar. Esto no tiene ningún tipo de sentido", ha señalado.
Además, el secretario de Estado ha comunicado que en la reforma se van a abordar otros elementos, como la incorporación de criterios medioambientales en los procesos de financiación de medicamentos. A este respecto, Padilla ha puesto a Reino Unido como ejemplo de modelo “muy claro y muy bueno”.
El departamento que dirige Mónica García ya había anunciado que, a través de esta reforma legislativa, también llegaría a una modificación del sistema de precios de referencia. Una de las claves en este aspecto es permitir la diferenciación de precio entre los medicamentos genéricos y de marca una vez que se liberan las patentes, una reivindicación que arrastraba el sector de los genéricos desde hace años.
Sobre este asunto, el Ministerio ha explicado a Medicina Responsable que se trata de un “aspecto fundamental para lograr precios más competitivos”. “El sistema actual obliga a igualar el precio del original. El incentivo para entrar en el mercado de un genérico cuando el precio es similar al del innovador es muy bajo y por eso cuesta mucho que los genéricos y biosimilares alcancen volúmenes grandes pronto”, sostienen desde Sanidad.
Por su parte, Padilla ha argumentado que “tenemos que contemplar cuáles son los elementos diferenciales que permitan al medicamento genérico aumentar la competitividad y su penetración de mercado para que podamos incorporarlos sin que eso suponga un lastre para la industria farmacéutica innovadora". De acuerdo con el secretario de Estado, "que un medicamento genérico se diferencie de precio hacia abajo no tiene por qué obligar a que el medicamento de marca automáticamente tenga que bajar también”, ha defendido.
Desde el Ministerio aclaran a Medicina Responsable que de esta forma se busca combatir la “rigidez” del actual sistema de precios de referencia y que esta medida se implantaría “en casos justificados y no de manera generalizada, cuando todavía existe competencia y la vulnerabilidad del medicamento es menor que cuando se queda solo en el mercado”.
Al hilo de la modificación de la Ley de Garantías y Uso Racional de Medicamentos, el secretario de Estado también ha tenido ocasión de entrar en el debate sobre la prescripción enfermera. “Desde nuestro punto de vista la redacción actual de la ley de medicamentos no es la adecuada para dar la suficiente seguridad jurídica y no facilita la implementación de las guías de indicación en las comunidades autónomas”, ha apuntado. También ha añadido que esta redacción “no protege la labor de la enfermera prescriptora y ni siquiera otorga el reconocimiento de la capacidad verdaderamente ligada a sus competencias”.
En base a ello, Padilla ha afirmado que esta modificación legislativa va a buscar una nueva redacción para adaptarse a esta situación con las nuevas indicaciones farmacológicas que han adquirido los profesionales de la enfermería.