Por Juan García
22 de enero de 2025La ministra de Sanidad, Mónica García, ha comparecido tras su reunión con los sindicatos para retomar la negociación sobre el Estatuto Marco. Sin querer “desgranar las medidas” por “respeto al proceso de negociación”, la ministra sí ha querido señalar que han corregido la redacción del documento para eliminar “equívocos” sobre el cómputo de horas que quedaría con la limitación a 17 horas por jornada. Además, ha mantenido su propuesta de establecer la dedicación exclusiva para los jefes de servicio que trabajen en la sanidad pública.
Tras conocer el borrador de Estatuto Marco, los sindicatos médicos y sanitarios mostraron su rechazo en bloque a estas propuestas, aunque tras esta reunión ha querido agradecer a estas organizaciones el “tono”, asegurando sentirse muy satisfecha con el diálogo. Sanidad señala que esta toma de contacto es solo el “reinicio” de las conversaciones paralizadas desde hace meses con el objetivo de “mejorar las condiciones laborales de los sanitarios” a través de una norma que lleva sin modificarse 22 años. Como líneas maestras de esta norma, ha apuntado a “poner coto a la precarización” para asegurar a los sanitarios estabilidad y capacidad de desarrollo profesional dentro del Sistema Nacional de Salud.
A propósito de la limitación de las jornadas para acabar con las guardias de 24 horas, uno de los grandes temores era que esta reducción de la jornada a un máximo de 17 horas se tradujera en recuperar esas horas en otro momento. Un extremo que García se ha comprometido a que no sucederá y que trabajan para aclarar la redacción del texto en este sentido. La ministra ha explicado que la primera redacción del texto ha dado lugar a “dobles interpretaciones”, por lo que ha aclarado que las horas de descanso con esta limitación “en ningún caso serán recuperables".
“Hoy está vigente que cuantas más guardias haces más horas le debes a la administración”, ha señalado. Una “aberración que arrastramos desde hace años” y a la que asegura quieren poner fin desde su Ministerio.
Desde UGT han señalado tras esta reunión que el texto presentado por Sanidad “no da respuesta a todas las demandas del colectivo” y reclama la apuesta por la jornada de 35 horas semanales para los sanitarios. En una línea similar, el sindicato de enfermería Satse ha reconocido avances en la negociación, pero apuntando que “aún hay mucho por mejorar y concretar”.
Otra de las medidas más controvertidas y que ha contado con el rechazo frontal de la profesión médica y los sindicatos es el establecimiento de la exclusividad para los jefes de servicio. Preguntada por esta medida y el revuelo generado, García ha señalado que esa es la propuesta de su departamento y que “está debatiéndose”. En este sentido, ha defendido que el tema de la exclusividad es algo que lleva debatiéndose “mucho tiempo en parlamentos” y que seguirán trabajando para conseguir un texto de consenso.
Sobre esta exclusividad para los médicos que acaban de terminar el MIR, García ha pedido "discreción" en la negociación, a la vez que destacado que el nuevo Estatuto Marco servirá para asegurar la "estabilidad" de los MIR y poner el "coto a la precarización que llevan viviendo desde hace tantos años"
Desde la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos, su presidente Miguel Lázaro, señala a Medicina Responsable que su postura sigue siendo la de reclamar un estatuto propio o, al menos, “un apartado específico que reconozca las singularidades de los médicos”.
En este sentido, el doctor Lázaro asegura que quieren comprobar si las medidas que propone Sanidad en el Estatuto Marco son “modificaciones estructurales o simplemente maquillaje”. Lázaro defiende la “enmienda a la totalidad” como un sentir común del colectivo tras conocerse el borrador, criticando medidas como la exclusividad por “sesgo ideológico”. También ha lamentado que la reforma siga manteniendo las jornadas de 48 horas semanales, la obligatoriedad y la no cotización de las horas de guardia y la elaboración de la reclasificación profesional “sin ninguna acción presupuestaria”.
El presidente de CESM argumenta la pertinencia de una singularidad para los médicos en base a que “somos los que más conocimiento atesoramos y tenemos el máximo nivel de responsabilidad como líderes del proceso asistencial”. En referencia a ello, señala que no reconocerlo es una “discriminación” hacia este colectivo que, tras conocer las propuestas del primer borrador, ha hecho “estallar” a la profesión. “Estamos indignados, los médicos lo que nos dicen es que hasta aquí hemos llegado”.
A pesar de todo ello, ha señalado que se muestra optimista de cara a las próximas reuniones para avanzar en sus reivindicaciones, aunque “la pelota está en el tejado de la administración”.