Por Virginia Delgado
18 de septiembre de 2025Orforglipron. Así se llama un nuevo fármaco oral para el tratamiento de la obesidad de Lilly que acaba de demostrar su eficacia, después de superar la fase 3 de un ensayo clínico internacional.
El estudio, en el que ha participado el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, se ha presentado en la Reunión Anual 2025 de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD), celebrado en Viena (Austria), y ha sido publicado por la revista The New England Journal of Medicine.
Su efectividad se ha probado después de que 3.100 personas de nueve países, que padecían obesidad, pero sin diabetes, participaran en una investigación que duró 72 semanas. Todos ellos eran adultos con un índice de masa corporal superior a 30 kg/m², o de entre 27 y 30 kg/m² con alguna complicación asociada a la obesidad, como hipertensión, enfermedades cardiovasculares o apnea del sueño. Aleatoriamente fueron asignados a diferentes dosis de orforglipron (6 mg, 12 mg o 36 mg) o a placebo, siempre en forma de una cápsula diaria.
Los resultados demostraron que el tratamiento con la dosis más alta de este fármaco consiguió una disminución media del 11,2% del peso corporal. Más de la mitad de los pacientes perdió un 10% de su peso y un 18% llegó a reducirlo en más del 20%. Además, se registraron mejoras significativas en la presión arterial, el perímetro de cintura, los niveles de triglicéridos y de colesterol, todos ellos factores de riesgo para enfermedades cardiovasculares. Respecto a los efectos adversos más frecuentes, fueron digestivos leves o moderados, como náuseas, estreñimiento, diarrea o vómitos.
Si orforglipron es aprobado por las autoridades competentes (está previsto que Lilly inicie en los próximos meses los procesos regulatorios necesarios), orforglipron se sumará a la lista de fármacos para la obesidad que actúan sobre el receptor GLP-1; una proteína que está presente en diferentes células implicadas en la regulación del apetito.
No obstante, este medicamento se diferencia porque tiene una estructura química diferente (es una molécula no peptídica) y se administra vía oral.
La coordinadora de la Unidad de Tratamiento Integral de la Obesidad del Vall d'Hebron y única autora europea de la publicación, Andreea Ciudin, ha explicado que la posibilidad de disponer de un fármaco oral sin las limitaciones de otros tratamientos representa “un avance importante para muchas personas con obesidad”. “Este estudio confirma -ha añadido- que podemos ofrecer opciones más cómodas e igualmente seguras que pueden favorecer que más pacientes accedan al tratamiento y lo mantengan a largo plazo”.