Por Juan García
15 de septiembre de 2025La Comunidad de Madrid busca consolidar su posición destacada en la industria farmacéutica nacional y colocarse “a la vanguardia” del sector en Europa. Sobre la base del destacado papel de la comunidad en ensayos clínicos, así como la robusta presencia de compañías del sector, el Gobierno autonómico ha presentado, en colaboración con Farmaindustria, la primera Estrategia Biofarmacéutica de una comunidad autónoma en España. El plan abarca diversas iniciativas hasta 2028 que buscan colocar a la región como una referencia a nivel mundial para el sector.
La iniciativa se vertebra en torno a tres ejes, encaminados a estrechar y mejorar la colaboración entre las entidades públicas y privadas para un ecosistema innovador más eficiente. Estos objetivos pasan, en primer lugar, por agilizar el acceso a la innovación a través de la simplificación de trámites administrativos. Además, tratará de fomentar el ecosistema investigador a través del trabajo en red entre centros sanitarios, empresas y administraciones. Como tercer eje, la estrategia pretende incentivar la inversión en el sector como motor económico, de empleo y de bienestar para los pacientes.
La consejera de Sanidad madrileña, Fátima Matute, ha mostrado su “orgullo” de presentar esta estrategia pionera, destacando con algunos datos los atractivos de la comunidad para el sector. Matute ha resaltado que este proyecto busca generar “un clima de confianza” entre los agentes para “fortalecer” el papel del sector, “aunando salud y economía”. Con una facturación que supera los 5.100 millones de euros anuales, la consejera ha resaltado que Madrid aglutina un 20% del total de las cifras de negocio del sector en España y más de 400 empresas en la comunidad.
La responsable de Sanidad ha apuntado al compromiso de su departamento para simplificar, agilizar y desburocratizar los procesos para incorporar la innovación, que ha puesto de manifiesto con iniciativas como la agencia de contratación para centralizar los procedimientos. Además, ha destacado el “trabajo en red” de centros investigadores y clínicos para implementar como característica que sitúa a su comunidad como líder en ensayos clínicos.
A propósito de la incorporación de la innovación Matute ha aludido al retraso en la toma de decisiones sobre financiación pública de medicamentos en España, que sube por encima de los 600 días de media. Al hilo, ha apuntado la necesidad de agilizar estos procesos, para lo cual apuesta por el reformar la Comisión Interministerial de Precios, un organismo cuyo funcionamiento ha calificado como “arcaico”.
Por su parte, la consejera de Economía y Hacienda, Rocío Albert, ha subrayado la conveniencia de “eliminar trabas” para favorecer a un sector de “elevado valor añadido, que genera empleo y productividad”.
Desde Farmaindustria celebran la puesta en marcha de la estrategia, destacando que “llega en el momento adecuado” ante el “convulso panorama internacional”, en palabras de su director general, Juan Yermo. Con un horizonte marcado por los aranceles y la pérdida de competitividad de la industria europea, Yermo ve una “ventana de oportunidad” para plantear inversiones y estrategia que reviertan estas tendencias a medio plazo.
En esta línea, la presidenta de esta entidad, Fina Lladós, ha resaltado que Madrid es uno de los “polos de atracción de inversión” y un lugar “muy privilegiado para liderar la innovación biofarmacéutica”. Contando con una de cada cinco de las plantas de producción farmacéutica que hay en España y más de un 30% de la inversión sanitaria privada a nivel nacional, Lladós ha apuntado que la estrategia en esta comunidad marca “el camino adecuado” para mejorar los tiempos de acceso a las terapias y favorecer el desarrollo de nuevos fármacos. Así, ha destacado la importancia que supone para trabajar en la autonomía estratégica, como un “ancla contra la incertidumbre en momentos convulsos”, ante las diferentes amenazas que plantea el escenario geopolítico actual para el sector.
Durante una mesa redonda, la presidenta y directora general de MSD España, Ana Argelich, ha subrayado la conveniencia de no imponer más restricciones para el acceso a los medicamentos aprobados por las agencias, además de ofrecer un entorno estable para la inversión. La directiva ha invitado también a “sacar pecho” del liderazgo de España en ensayos clínicos, instando a facilitar su puesta en marcha y desarrollo.
Por su parte, la presidenta y CEO de GSK España, Cristina Henríquez de Luna, ha puesto el foco en la necesidad de invertir en prevención para colocar a Madrid como “un lugar de excelencia a nivel europeo”, apostando por la investigación de nuevos medicamentos y su incorporación ágil al sistema sanitario. Unos objetivos para los cuales el presidente de Rovi, Juan López Belmonte, ha destacado las ventajas de Madrid como una “potencia” del sector, marcando como objetivo de esta estrategia situar a la comunidad como un “hub internacional” en materia de innovación.