Por Juan García
1 de julio de 2024El verano se presenta complicado para las plantillas médicas en España. Al déficit “crónico” de profesionales que viene denunciando desde hace años la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), se suma la excepcional circunstancia ocurrida con los MIR de último año: el retraso en el inicio de su formación provoca que terminen en septiembre, en lugar de en junio, lo que impide que sean contratados, como venía siendo habitual, durante el verano para afrontar los relevos por vacaciones.
La tormenta perfecta se intensifica en la especialidad que más acusa la falta de profesionales: Medicina Familiar y Comunitaria. Tras la aprobación la semana pasada de la Proposición No de Ley (PNL) promovida por el Partido Popular para paliar la carencia de médicos, desde Semergen muestran su “total desacuerdo a que los MIR de cuarto año sean utilizados como solución”.
Desde la Sociedad se reiteran en su rechazo a que los MIR puedan incorporarse a hospitales y centros sanitarios antes de haber finalizado su formación. La entidad se ha pronunciado en un comunicado en el que señalan que los residentes no deben ser utilizados “como solución a la falta de planificación para las coberturas de verano, ni para cubrir los déficits estructurales” de nuestro sistema sanitario.
"Utilizar a los residentes como una solución rápida para la falta de médicos en nuestro sistema es inapropiado y desatiende las verdaderas causas y soluciones para este problema", afirma la doctora María José Gamero, responsable de Tutores y Residentes de Semergen. En su opinión, “aunque nuestros residentes están altamente preparados para proporcionar atención médica de calidad y manejar consultas de forma autónoma, la supervisión física y cercana es crucial para garantizar la calidad de asistencia a estos residentes”.
Semergen enfatiza que, a pesar de la capacitación y autonomía de los residentes, “deben contar con la presencia física de un tutor en el mismo centro de salud para garantizar una supervisión adecuada”.
La saturación de las agendas y el cierre de consultas son las consecuencias previsibles de esta “falta de planificación” de las administraciones frente a los relevos vacacionales del verano. Por ello, desde la Sociedad hacen un llamamiento a las autoridades sanitarias para reconsiderar cómo se están abordando los problemas de personal en el sistema de salud y para desarrollar una estrategia sólida que no dependa exclusivamente de los médicos en formación.
Los médicos de atención primaria marcan como línea roja la necesidad de respetar y proteger la integridad formativa de los residentes de Medicina Familiar y Comunitaria para así buscar soluciones a largo plazo a la escasez de médicos que afecta a la sanidad española.