Por Juan García
19 de diciembre de 2023En su reunión anual, celebrada en el Colegio de Médicos de Madrid, la Sociedad Madrileña de Microbiología Clínica (SMMC) ha dado la voz de alarma ante la aparición del hongo conocido como “Candida Parapsilosis”. Su presencia se ha detectado en al menos siete hospitales de la Comunidad de Madrid, además de en otros centros de España.
Este hongo es una causa frecuente de la candidiasis, manifestándose en la piel de personas sanas, las mucosas genitales o el tubo digestivo. La microbióloga Patricia Muñoz García, presidenta de la SMMC, ha explicado cómo el elevado poder de transmisión es el factor más preocupante de la nueva cepa de este hongo detectada en Madrid. Además, su inmunidad frente al fluconazol, la toxina que se utiliza para la prevención y la curación de los hongos, lo convierte en superresistente a los tratamientos antifúngicos, lo cual dificulta considerablemente su tratamiento.
En los casos en los que este hongo surge en entornos hospitalarios, su aparición viene derivada del uso de implantes médicos, así como de catéteres y otras vías de administración por inyección. Las primeras detecciones de Candida Parapsilosis se dieron en un hospital mallorquín y otro de Barcelona, llegando a siete centros en la Comunidad de Madrid, aunque no han detallado cuáles exactamente. Desde la SMMC explican que uno de estos hospitales madrileños está consiguiendo frenar su propagación, pero en los demás la incidencia es muy alta. También alertan de la expansión a otros lugares de España, como Burgos o Ávila.
La procedencia de estas cepas en las distintas ciudades es, por el momento, desconocida ya que son mutaciones que no tienen nada que ver entre sí. "Los clones que ha habido en Mallorca, en Barcelona, o en Madrid, son clones independientes", explica Muñoz García. La presidenta del SMMC ha aprovechado su intervención para hacer hincapié en la importancia de localizarlo a tiempo: "Es crucial detectar muy pronto el primer paciente que ingrese a nuestro hospital y así evitar su diseminación. Una vez que entra en el hospital, es difícil librarse de ella".
Las personas inmunodeprimidas, es decir, las que tienen menor capacidad de respuesta de su sistema inmunológico, son las más vulnerables frente a este hongo. Este patógeno se presenta en el organismo de formas muy diversas y, aunque los síntomas son leves, pueden agravarse rápidamente si no se tratan adecuadamente. Se manifiesta a través de erupciones rojizas y dolorosas que pueden darse en los ojos, la boca, la vagina o las uñas. También puede producir irritación del sistema digestivo, acompañada de dolores abdominales, así como irritación en las membranas internas del organismo.
En cuanto a su tratamiento, el primer paso es la supresión del consumo de antibióticos y, en el caso de las mujeres, también los anticonceptivos intravaginales. Una vez infectados, los pacientes deben ser tratados por vía intravenosa de manera obligatoria. En casos de infección ocular y siempre bajo supervisión médica, el fármaco voriconazol también se muestra efectivo.