La Paz reabre su UCI pediátrica con seis profesionales y una jefa de servicio provisional

Después de que la consejera de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute, anunciara ante los medios de comunicación el pasado viernes que “el doctor Pedro de la Oliva ya es el antiguo jefe de servicio de la UCI, por lo que a partir de este momento este servicio empieza a trabajar sin doctor dentro”, fuentes del Hospital Universitario de la Paz han confirmado a Medicina Responsable que la UCI se ha reabierto con seis camas, de momento bajo las órdenes de la doctora Paloma Dorao, uno de los médicos adjuntos de la Unidad de Cuidados Intensivos que estará al frente del servicio de forma provisional hasta que se nombre a un nuevo jefe.

Desde la consejería confirman que los profesionales adjuntos irán incorporándose poco a poco ya que aún están acabando con “el tema jurídico”. Matute ha confirmado que se han reincorporado seis profesionales con lo que "el servicio de pediatría de la UCI queda restablecido. Se espera que a lo largo de la semana el funcionamiento de esta unidad se desarrolle al 100%"

La reapertura de este servicio del hospital madrileño llega inmediatamente después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) volviera a dar la razón a la Comunidad de Madrid en el conflicto abierto en la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátrica (UCIP) de la Paz y desestimara la resolución del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo, del pasado mes de junio, que ordenaba la reincorporación del doctor Pedro de la Oliva al servicio del hospital. 

Con esta decisión pierde virtualidad el recurso que presentó este profesional sanitario en relación con la suspensión de su jefatura, dónde alegaba que su cese no era procedente. 

Una semana antes, el mismo tribunal madrileño avalaba la decisión del gobierno regional de cesar al doctor por el "interés general", para que este servicio fundamental recuperara la actividad cuanto antes.

Un conflicto que se remonta a 2020

El conflicto se remonta a 2020, con una investigación de la dirección del centro que terminó en el cese del jefe de servicio tras una carta firmada por 37 profesionales, entre ellos varias personas de su mismo rango, en la que se denunciaba su actitud, con acusaciones de acoso, vejaciones y maltrato psicológico.

Posteriormente, fue restituido en su puesto como jefe del servicio por decisión judicial en febrero de 2023, incorporándose al centro en septiembre. Fue en ese momento cuando siete de los 13 pediatras que prestaban servicio en la UCI Pediátrica presentaron su baja. Tras una solicitud impulsada por la Junta Técnica Asistencial, donde están representadas todas las categorías profesionales del centro, se instó a su cese por su incapacidad para gestionar el servicio, que fue atendido por parte de la Dirección del centro y el Servicio Madrileño de Salud (Sermas).

El pasado mes de diciembre dejó su cargo en el centro, pero el pasado lunes, día 15, por "sorpresa" acudió a su puesto para informar de su nueva reincorporación, la segunda, a partir del martes, como medida cautelar por una decisión judicial. Durante todo este tiempo, según han explicado los profesionales, se han publicitado los puestos vacantes en la unidad sin que hayan podido ser cubiertos, excepto dos, porque "nadie en España quiere trabajar en esta unidad" bajo su mando.

La UCI Pediátrica atiende cada año a más de 900 niños en estado crítico de todo el territorio nacional y con una gran complejidad médico-quirúrgica como trasplantes, cardiopatías congénitas, politraumatismos, accidentes, oncología, patologías metabólicas, enfermedades raras y graves, entre otras.

---