Por Medicina Responsable
20 de mayo de 2025La Asamblea Mundial de la Salud, que se celebra durante esta semana en la sede de Naciones Unidas en Ginebra, ha aprobado por consenso de todos los países miembros el primer Tratado de Pandemias, con el fin de evitar la situación vivida durante la Covid-19 y fortalecer la capacidad de respuesta sanitaria a nivel global.
Después de más de tres años de “intensas negociaciones”, la aprobación se ha producido con 124 votos a favor, 0 objeciones y 11 abstenciones por parte de las delegaciones de los Estados Miembros.
"El acuerdo representa una victoria para la salud pública, la ciencia y la acción multilateral. Garantizará que, colectivamente, podamos proteger mejor al mundo de futuras amenazas pandémicas. También representa un reconocimiento por parte de la comunidad internacional de que nuestros ciudadanos, sociedades y economías no deben quedar expuestos a sufrir nuevamente pérdidas como las sufridas durante la Covid-19", ha señalado el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
El Tratado de Pandemias establece los principios, enfoques y herramientas para una mejor coordinación internacional en diversas áreas, con el fin de fortalecer la estructura sanitaria mundial para la prevención, preparación y respuesta ante pandemias. Esto incluye el acceso equitativo y oportuno a vacunas, terapias y diagnósticos.
Este documento también establece los pasos necesarios para preparar su implementación. Ente ellos, incluye el inicio de un proceso para redactar y negociar un Sistema de Acceso a Patógenos y Distribución de Beneficios (SAP) a través de un Grupo de Trabajo Intergubernamental (GTI). El resultado de este proceso se analizará en la Asamblea Mundial de la Salud del próximo año, cuando quedará abierto a la firma y a la consideración de su ratificación, incluso por los órganos legislativos nacionales. Finalmente, el acuerdo entrará en vigor tras 60 ratificaciones.
"El Tratado de Pandemias sienta las bases para su adopción inmediata y representa un paso gigante y unánime que aportará solidaridad, equidad y, sobre todo, evidencia científica para una mejor preparación compartida frente a futuras amenazas pandémicas. Es una noticia esperanzadora en medio de un contexto de pesimismo y desmoralización generalizada en relación con la financiación de la ayuda al desarrollo", ha declarado a Science Media Center el pediatra, epidemiólogo y director general del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), Quique Bassat.
Además, los Estados Miembros han ordenado la creación de un Mecanismo Financiero de Coordinación para la prevención, preparación y respuesta ante pandemias, y la Red Mundial de Cadenas de Suministro y Logística para “mejorar, facilitar y trabajar para eliminar barreras y garantizar el acceso equitativo, oportuno, rápido, seguro y asequible a los productos sanitarios relacionados con pandemias”.
Según el acuerdo, los fabricantes farmacéuticos desempeñarán un papel clave, poniendo a disposición de la OMS un acceso rápido al 20% de la producción en tiempo real de vacunas, terapias y diagnósticos seguros. La distribución de estos productos a los países se realizará en función del riesgo y la necesidad para la salud pública, con especial atención a las necesidades de los países en desarrollo.