Nueve millones de españoles sufren dolor crónico y un 40% tarda más de un año en ser diagnosticado

La Fundación Grünenthal y el Observatorio del dolor de la Universidad de Cádiz han presentado el “Barómetro del dolor crónico en España 2022”, una profunda revisión del dolor crónico de los españoles de la que se extrae que nueve millones de españoles lo padecen, el 25,9% de la población. Sin embargo, a pesar de esta alta incidencia, la mayoría de las personas tardan más de un año en obtener este diagnóstico, de hecho, la media está en 2,2 años de espera. 

Si ponemos el foco en estos pacientes que sufren dolor crónico, se estima que un 30,5% son mujeres y un 21,3% son hombres. Además, los más afectados son aquellos que se encuentran entre los 55 y los 75 años y los menos los que tienen entre 18 y 34 años. Asimismo, se ha podido determinar que el padecimiento de esta enfermedad se alarga durante un periodo de 6,8 años con una intensidad media del dolor de 6,8 puntos, siendo 10 un dolor insoportable y 0 ausencia de dolor. 

¿Qué les duele más a los españoles?

El dolor crónico condiciona al paciente a nivel físico, psicológico y social, siendo la Atención Primaria el servicio de referencia para los que lo padecen, ya que el 86,7% de ellos acude a este nivel asistencial. Por otro lado, el servicio especializado más utilizado es el de traumatología, con un 69,4% de las visitas, seguido de fisioterapia con un 36,7%, medicina interna con un 31,2%, rehabilitación con un 27,6%, unidades del dolor con un 24,1%, neurología con un 22,8%, reumatología con un 22,5%, neurocirugía con un 11,8% y oncología con un 5,3%.

Los diagnósticos más habituales son el dolor lumbar (58,1%), contractura muscular (50,6%), dolor cervical (46,2%), artrosis (33%), osteoporosis (32,9%), migrañas (31,5%), dolor de hombros (29,2%), dolor indeterminado (27,1%), ciática (25,6%) y artritis reumatoide (18,1%). Asimismo, cabe destacar que un 22,2% de los pacientes que padecen dolor crónico sufre depresión y un 27,6% ansiedad. 

Propuestas de mejora del manejo del dolor crónico

• Favorecer el desarrollo de la medicina personalizada y la implementación de las nuevas tecnologías en salud como herramienta de seguimiento permanente.
• Potenciar la figura del profesional de referencia en Atención Primaria, nivel asistencial en el que son atendidos la amplia mayoría de los pacientes. Favorecer la formación y capacitación en AP y su papel como responsable de la coordinación y la cooperación entre servicios.
• Potenciar una coordinación entre niveles asistenciales más ágil y eficiente que permita un abordaje multidisciplinar del paciente.
• Fomentar el carácter multidisciplinar de las unidades del dolor y estandarizar su cartera de servicios y profesionales para maximizar su despliegue en los hospitales y reducir las desigualdades de acceso.
• Favorecer la coordinación entre los servicios del Sistema Nacional de Salud y los servicios biopsicosociales.
• Transformar el modelo de comunicación sanitario-paciente para mejorar la participación del paciente y favorecer un cambio de rol hacia un papel central en la toma de decisiones.
• Establecer sistemas de evaluación de los modelos asistenciales por parte de profesionales y pacientes, con el objetivo de buscar la mejora continua y la excelencia asistencial.
• Mejorar la sensibilización social para favorecer el conocimiento del impacto de la enfermedad en los pacientes y potenciar el apoyo a todos los niveles.
• Potenciar la educación y formación de los pacientes y cuidadores a través de programa específicos de dolor crónico.

---