EE. UU demanda a Facebook e Instagram por “poner en peligro” la salud mental de los niños

Las autoridades estatales de Estados Unidos quieren frenar el impacto de Facebook, Instagram y WhatsApp en la salud mental de niños y adolescentes y quieren que la empresa Meta, propiedad de Mark Zuckerberg, cambie las características de sus redes sociales por su “peligrosidad”.

Una coalición de 41 estados de EE.UU y el distrito de Columbia han demandado a la compañía Meta, propietaria de Facebook, Instagram y WhatsApp, argumentando que sus redes sociales son adictivas y dañinas para los niños. Un total de 33 estados, entre otros Colorado y California, presentaron una demanda conjunta en un tribunal federal del Distrito Norte de California, mientras que otros fiscales generales de Washington D.C. y 8 estados están presentando denuncias separadas en tribunales federales, estatales o locales.

Un problema nacional

En una conferencia de prensa conjunta, varios fiscales generales destacaron que la adicción a estas redes sociales es un “problema nacional” y que, pese a la división política entre republicanos y demócratas, han sido capaces de trabajar juntos en esta cuestión, que es comparable con la lucha contra el tabaco o el opio. Además, dejaron entrever que se podrá esperar una demanda similar contra la red social china TikTok, pero no dieron más datos.

El fiscal general de Tennessee, Jonathan Skrmetti, apuntó que Instagram ha dirigido su aplicación a adolescentes y niños, los cuales “son más vulnerables y susceptibles a este tipo de manipulación”.

El origen de la demanda a Meta

La raíz de todas las demandas parte de una investigación de 2021 que acusaba al titán tecnológico Meta de contribuir a distintos problemas de salud mental entre los jóvenes.

En 2021, The Wall Street Journal expuso, en un reportaje elaborado con información interna, cómo Instagram empeoraba la percepción de los usuarios -sobre todo niñas y adolescentes- sobre sus cuerpos, y señaló que la compañía era consciente de este problema.

Desde entonces, algunos estados como Arkansas y Utah han aprobado leyes que prohíben el acceso de los niños menores de 13 años a las redes sociales y exigen que los adolescentes menores de 18 años obtengan el consentimiento de sus padres para acceder a los sitios. Qué dicen los psicólogos y psiquiatras en España

En el mundo hay más de 4.500 millones de usuarios de redes sociales como Facebook, Twitter, o Instagram. Personas que, además de ser objetivo de ciberataques, pueden caer presas de la adicción, una enfermedad reconocida en el libro de la Asociación Americana de Psiquiatría DSM-5.

De acuerdo con el informe elaborado por UNICEF “Impacto de la Tecnología en la Adolescencia. Relaciones, Riesgos y Oportunidades”, uno de cada tres adolescentes en España hace un uso problemático de Internet y las redes sociales. ¿La razón? A veces las usan como refugio para eludir el sufrimiento y evadir sentimientos de malestar.

Según Elena Daprá, psicóloga sanitaria y experta en bienestar psicológico, “los españoles pasamos de media entre 5 y 7 horas usando redes sociales, incluyendo  Whatsapp, pero para hablar de adicción hay que tener en cuenta varios factores”. Para la experta, “las redes sociales no tienen por qué ser dañinas, es el tipo de uso que se les dé lo que puede provocar el daño o no. En la adolescencia hay mayor impulsividad y algunos jóvenes pueden tener ansiedad y depresión y otros no. El problema aparece cuando los adolescentes no saben comparar sus vidas con las vidas maravillosas y perfectas que aparecen en redes, y que realmente no son así. Yo tengo en consulta a influencers e instagramers que vienen a terapia por falta de autoestima, ansiedad, depresión y, sin embargo, en sus redes se manifiestan como perfectos”.

 

 

 

 

 

 

 

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