Por Juan García
26 de marzo de 2025Dice el refrán que somos lo que comemos y, según un nuevo estudio de la Universidad de Harvard, esta sería una hipótesis que tiene una especial validez a medida que cumplimos años. Los autores de esta investigación recopilaron información sobre los hábitos alimenticios de más de 100.000 personas durante 30 años para determinar el impacto de sus dietas sobre la aparición de enfermedades y problemas de salud durante la vejez, encontrando ocho pautas dietéticas que se vincularon con una mayor probabilidad de envejecimiento saludable.
Se entiende por envejecimiento saludable la llegada a los 70 años libre de enfermedades crónicas importantes y con una salud cognitiva, física y mental en buenas condiciones. Los datos sobre la dieta de los participantes fueron extraídos del Estudio de Salud de Enfermeras y del Estudio de Seguimiento de Profesionales de la Salud, examinando las dietas y los resultados de salud de hombres y mujeres de entre 39 y 69 años durante tres décadas. En la investigación, publicada en la revista Nature, participaron también investigadores de Universidad de Copenhague, y Universidad de Montreal.
Los resultados mostraron una asociación positiva entre ocho patrones dietéticos y el envejecimiento saludable: el índice alternativo de alimentación saludable (AHEI), el índice alternativo mediterráneo (aMED), los Enfoques Dietéticos para Parar Hipertensión (DASH), la Intervención Mediterránea-DASH para el Retraso Neurodegenerativo (MIND), la dieta saludable basada en plantas (hPDI), el índice de dieta de salud (PHDI), el patrón dietético empírico (IPED) y el índice dietético empírico para la hiperinsulinemia (EDIH).
Entre ellos, el método AHEI fue el más eficaz, aunque todos enfatizan la alta ingesta de frutas, verduras, granos integrales, grasas insaturadas, nueces y legumbres, además de una ingesta moderada de alimentos sanos a base de animales como pescado y ciertos productos lácteos. Entre los participantes que se ciñeron a este modelo AHEI, también se encontraron diferencias en función del nivel de cumplimiento de los patrones de dieta que propone. Así, los participantes en el quintil más alto de la puntuación de la AHEI tuvieron un 86% mayor probabilidad de envejecimiento saludable a los 70 años y una probabilidad de 2,2 veces mayor de envejecimiento saludable a los 75 años en comparación con los del quintil más bajo.
La conclusión que arrojan estos resultados es que lo más recomendable para envejecer con buena salud es mantener una dieta rica en vegetales, con una ingesta baja de alimentos sanos a de origen animal y eliminando el consumo de ultraprocesados.
En base a ello, los investigadores señalan que adherirse a cualquiera de estos patrones dietéticos saludables está vinculado al envejecimiento saludable general y el mantenimiento de la salud cognitiva, física y mental. “Nuestros hallazgos también muestran que no hay una dieta única. Las dietas saludables se pueden adaptar a las necesidades y preferencias individuales”, explica la autora principal Anne-Julie Tessier, profesora asistente en el Departamento de Nutrición de la Universidad de Montreal.
No obstante, los autores reconocen las limitaciones del estudio, siendo la principal que la población analizada estaba compuesta exclusivamente por profesionales de la salud. Para hacer frente a estas limitaciones, sugieren ampliar la muestra a poblaciones con diferentes niveles socioeconómicos y antecedentes genéticos diversos.