Por Andrea Rivero
23 de enero de 2023Innovación, transformación e integración son los tres pilares que están, indiscutiblemente, ligados al futuro de los centros hospitalarios. Sin ellos, no se podría avanzar. Esa es una de las conclusiones que varios expertos han expuesto durante la mesa “Hospital sin paredes, ¿realidad o futuro?”, llevada a cabo en la III Jornada SEDISA-SEFH. Pero ¿a qué se refieren los expertos cuando hablan de hospital sin paredes?
Aunque este concepto pueda parecer extraño, no hay que tomarlo de forma literal. No se trata de un gran centro hospitalario sin pared alguna donde todos ven a todos y la intimidad brilla por su ausencia. De hecho, este concepto quiere ser todo lo contrario, quiere ofrecer al paciente comodidad, seguridad y tranquilidad. “Se trata de algo muy sencillo, es llevar el hospital a la casa del paciente, es decir, llevar los servicios que el paciente necesita y que no salga de su entorno. Esto ayudará a que podamos atender a más pacientes y que estos puedan mantenerse en su entorno, lo cual es especialmente importante en algunos casos”, explica a Medicina Responsable Alberto Morell Baladrón, jefe de servicio de farmacia en el Hospital Universitario La Princesa de Madrid, donde actualmente se están llevando a cabo un proyecto de esta índole.
Una de las principales preocupaciones de los pacientes en este nuevo concepto es saber dónde estarán los médicos, enfermeros o farmacéuticos. De acuerdo con Morell, los pacientes no deben preocuparse, ya que lo que “tienen que tener cerca es el sistema, por eso es tan importante que haya tecnología que te permita estar en contacto rutinario para saber que no pasa nada y que si hay alguna alerta, se pueda intervenir de forma presencial. El paciente de hospitalización a domicilio no está solo en su casa, el hospital está detrás. Debe de tener las visitas regladas, la administración de la medicación, una conciliación con su actividad física y su dieta, etc., siempre debe seguir las pautas del hospital”.
Los expertos coinciden en que evitar que los pacientes pierdan su entorno es beneficioso para su recuperación ya que, como explica Morell, “las personas mayores se desorientan y, en general, tienen menos actividad física al estar en un entorno más cerrado”. Además, el propio hospital obtiene ventajas, ya que esto permite aumentar el número de personas a las que pueden tratar y, a su vez, abaratar costes”.
Además, este concepto traería consigo importantes beneficios en zonas como la España vaciada. “Imagínate tener a un familiar hospitalizado a 120 kilómetros, pudiendo estar ingresado en casa y que la asistencia sea al nivel necesario. Es una gran ventaja”, añade el farmacéutico. Asimismo, destaca que las personas cada vez tienen mayor conexión e información con todo lo que ocurre en el mundo, por lo que una conexión directa con el hospital tiene todo el sentido.
De cara al futuro, poder ofrecer los servicios hospitalarios en el domicilio también ayudaría “a hacer frente a la demanda asistencial que vendrá seguro”.
En el Hospital Universitario La Princesa, en Madrid, donde trabaja Morell, están llevando a cabo un proyecto de envíos de medicación a domicilio. El paciente que acude a su médico especialista y este le prescribe alguna medicación que deba recoger en la farmacia del hospital, la puede recibir directamente en su domicilio, todo ello bajo la supervisión del farmacéutico que realiza teleconsultas con el paciente para saber cómo se encuentra y cómo le está sentando el fármaco. Según Morell, “este servicio es un valor que aportas a todo el proceso asistencial, le llega la medicación, alguien está pendiente y no exige el desplazamiento. Además, cubre una necesidad, ya que cada vez somos más mayores y esto va unido a mayor discapacidad y a mayor dependencia de tratamientos farmacológicos”.
Por otro lado, durante la jornada, el doctor Carlos Bibiano Guillén, coordinador de urgencias del Hospital Universitario Infanta Leonor de Madrid, explicó el proyecto de hospitalización domiciliaria que está realizando este centro y destacó que la manera de poder llevarlo a cabo ha sido integrando la atención presencial con la virtual, ya que “la tecnología no va a sustituir a nadie”, aclara el doctor Bibiano. Además, de esta manera se está fomentando la personalización de los tratamiento y necesidades de cada paciente.
“Los hospitales nos estamos agarrando mucho todavía a la asistencia presencial y al entorno físico, pero eso va a cambiar sí o sí porque todo lo que viene es digital”, concluye Alberto Morell.