Por Andrea Martín
31 de octubre de 2023Cada año, millones de personas en todo el mundo sufren un ictus isquémico, el tipo más común de ictus. Un accidente cerebrovascular isquémico ocurre cuando un coágulo de sangre bloquea un vaso sanguíneo del cerebro, lo que hace que una parte del cerebro no reciba sangre o sea insuficiente. Un rápido tratamiento es crucial para prevenir una discapacidad permanente o la muerte.
Con el objetivo de diagnosticar un derrame cerebral antes de que el paciente llegue al hospital, investigadores de Universidad de Medicina (UMC) de Ámsterdam han diseñado un gorro capaz de diagnosticar un accidente cerebrovascular en la ambulancia, lo que permite que el paciente reciba el tratamiento adecuado más rápidamente. "Nuestra investigación muestra que el dispositivo puede reconocer con gran precisión a los pacientes con un accidente cerebrovascular isquémico. Esta es una muy buena noticia porque puede salvar la vida al paciente", afirma Jonathan Coutinho, neurólogo en la UMC de Ámsterdam, uno de los inventores del gorro.
El gorro permite realizar un EEG (prueba de ondas cerebrales) en la ambulancia. Esta prueba de ondas cerebrales muestra si existe un accidente cerebrovascular isquémico y si el vaso sanguíneo cerebral bloqueado es grande o pequeño. Esta distinción determina el tratamiento que necesita el paciente: en caso de que un accidente cerebrovascular isquémico sea pequeño, el paciente recibe un anticoagulante, y en caso de un accidente cerebrovascular isquémico grande, el coágulo de sangre debe eliminarse en un hospital especializado. "En el caso del ictus, cuanto antes iniciemos el tratamiento adecuado, mejores serán los resultados. Si el diagnóstico ya está claro en la ambulancia, se puede derivar al paciente directamente al hospital adecuado, lo que ahorra un tiempo valioso ", explica Coutinho.
Entre 2018 y 2022, este dispositivo se probó en 12 ambulancias holandesas y se recogieron datos de casi 400 pacientes donde se pudo reconocer con precisión un gran número de accidentes cerebrovasculares. Actualmente se está llevando a cabo un estudio de seguimiento (AI-STROKE) que recopila más mediciones para desarrollar un algoritmo que mejore el reconocimiento de un accidente cerebrovascular isquémico en la ambulancia. La Fundación Holandesa del Corazón también reconoció la importancia de esta investigación y puso a disposición 4 millones de euros para investigaciones a gran escala sobre el tratamiento más rápido del accidente cerebrovascular isquémico.
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