Por Pedro Martínez
4 de junio de 2025La farmacéutica Viatris ha presentado una Guía de Salud Mental de autoayuda para docentes, una herramienta práctica destinada a apoyar al profesorado ante los crecientes desafíos emocionales que experimentan en las aulas. La presentación ha reunido a expertos del ámbito sanitario y educativo con el objetivo de reflexionar sobre la necesidad urgente de reforzar la formación de autoayuda de los profesores para que puedan contribuir al bienestar emocional de la comunidad educativa.
La guía surge como respuesta a una necesidad urgente: un 47% del profesorado asegura que se enfrenta semanalmente a alumnos con posibles problemas emocionales, mientras que tres de cada cuatro reconocen no disponer de herramientas para gestionar este tipo de eventualidades adecuadamente. Este dato se extrae del estudio realizado por Metroscopia, empresa especializada en estudios sociales, tras entrevistar a 500 personas relacionadas con el ámbito docente, de los que el 74% son profesores y el resto personal directivo de los centros educativo, orientadores, personal administrativo, monitores, personal subalterno y de servicios.
De acuerdo con el informe, el 76% de estos profesionales asegura no disponer de los recursos adecuados para desenvolverse con garantía de éxito en este tipo de situaciones en el aula. Además, el 90% expresa su deseo de recibir formación específica en salud mental y sólo el 52% de los profesionales asegura haber sido puesto en conocimiento de un problema de salud mental por parte de, al menos, uno de sus alumnos.
Además, el estudio ha podido determinar cuáles son los problemas de salud mental más comunes entre los jóvenes, siendo en primer lugar la ansiedad, seguido de la depresión, los trastornos del comportamiento, el TDAH, trastornos alimenticios, conductas agresivas, ideas de suicidio y, finalmente, la adicción a los dispositivos electrónicos y las redes sociales.
Durante la presentación de la guía, Diana Jiménez, psicóloga, neuropsicoterapeuta educativa y colaboradora en la elaboración de la guía, ha destacado que un aula “no puede desligarse del mundo emocional del alumno. Cuando no entendemos lo que les pasa, dejamos solos a quienes más necesitan ser acompañados”. Para Jiménez, dotar al profesorado de herramientas sencillas y concretas es el primer paso para romper el estigma y ayudar desde su rol como docente a prevenir situaciones de gravedad.
En la misma línea, Nuria Tur, psiquiatra especializada en infancia y adolescencia, ha señalado que el aula se ha convertido, en muchos casos, en el primer lugar donde se manifiestan los síntomas del malestar, y el profesorado necesita apoyo y claridad para saber cómo actuar sin asumir un rol clínico que no le corresponde”. Tur ha querido subrayar la importancia de trabajar en red con los servicios sanitarios y familias para que el acompañamiento sea efectivo y sostenible.
En este contexto, Rosa Molina, psiquiatra y divulgadora en salud mental, ha valorado la guía como “una iniciativa necesaria, que acerca el conocimiento clínico a un lenguaje educativo y práctico”. Por su parte, Diana Al Azem, docente de educación secundaria, ha querido dar el punto de vista común entre muchos docentes, explicando que “convivimos a diario con el impacto emocional que viven nuestros alumnos, pero muchas veces no sabemos cómo acompañarlos de forma adecuada”.
La guía, elaborada por profesionales en salud mental, ofrece unas pautas claras para identificar las posibles señales de alarma temprana de ansiedad, depresión, trastornos de conducta alimentaria o alteraciones del sueño, explicando el modo en el que es posible contribuir a una mejor gestión, con responsabilidad y empatía, sin dejar de lado los límites en las competencias de los docentes.
Finalmente, Mercedes Navío Acosta, gerente asistencial de Hospitales del Servicio Madrileño de Salud, ha sido la encargada de cerrar el acto poniendo en valor el trabajo de la Consejería de Salud de Madrid en relación a los problemas de salud mental de los más jóvenes. “La salud mental para la Comunidad de Madrid es una prioridad desde hace más de un lustro, cuando comenzamos con un conjunto de planes intensivos y consecutivos de salud mental con una inversión de más de 100 millones de euros, siendo un modo multidimensional de trabajar que trabajará siempre de manera conjunta con la Conserjería de Educación de Madrid”.