Por Andrea Rivero
8 de febrero de 2023Los muros que levantan nuestras defensas han sido derribados y muchos de nosotros hemos caído bajo el ataque de alguna gripe, resfriado o catarro en los últimos meses. Algunos incluso más de una vez. ¿Cómo es posible que teniendo todo un ejército en nuestro interior que lucha contra infecciones hayamos enfermado más de una vez? Posiblemente se deba a que nuestro sistema inmune es débil o está debilitado por alguna causa y nuestro organismo nos manda señales para saber que esto está ocurriendo. Sólo hay que saber reconocerlas.
El síntoma principal de un sistema inmunitario débil es la facilidad que tiene para contraer infecciones. Una persona que tenga su sistema inmune en horas bajas es probable que contraiga infecciones con más frecuencia que el resto, además, estas podrían ser más graves y difíciles de tratar. Asimismo, estas personas contraerán infecciones que una persona con un sistema inmunitario más fuerte no desarrollaría. Entre las patologías que un sistema inmunitario débil puede desarrollar frecuentemente se encuentran la neumonía, la bronquitis y las infecciones de la piel. Pero, además, existen una serie de síntomas que también acompañan a este problema como anemia, pérdida de apetito, calambres abdominales, diarrea y retrasos en el crecimiento y desarrollo en bebés y niños.
Para entender esto primero hay que conocer algo más sobre el sistema inmune. Tal y como explica el doctor Pedro Gargantilla, director médico de Medicina Responsable, “este sistema puede ser de dos tipos: celular y humoral. En el primero fundamentalmente hay células (linfocitos, macrófagos y neutrófilos) y el segundo está compuesto por anticuerpos, también llamados inmunoglobulinas”.
En el caso del sistema de tipo celular, se dice que está debilitado cuando alguna de las células que lo componen están dañadas, por ejemplo, en el caso del sida. “Están disminuidos los linfocitos T y, por tanto, su sistema inmune está debilitado”, explica el doctor Gargantilla. Por otro lado, el sistema humoral “puede verse debilitado a causa de ciertas infecciones o tratamientos inmunodepresores. Las personas que reciben quimioterapia, por ejemplo, tienen un sistema inmune debilitado”, finaliza.
Más allá de estos casos, las personas que enferman a menudo pueden seguir una serie de recomendaciones que les ayudará a reforzar su sistema inmune y a mejorar su calidad de vida: