Por Andrea Rivero
25 de enero de 2023La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), junto a otras sociedades científicas entre las que se encuentran la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) y la Asociación Española de Urología (AEU), han elaborado un documento de posicionamiento para solicitar que se prioricen en las listas de espera de cirugía bariátrica a las mujeres con obesidad grave e infertilidad y mayores de 35 años para así mejorar las tasas de natalidad.
En este documento se incide en la necesidad de preparar un abordaje común ya que, como alerta la doctora Inka Miñambres Donaire, primera autora del documento y miembro del área de obesidad de la SEEN, “el aumento de la prevalencia de la obesidad entre la población repercute en que sus enfermedades asociadas también se incrementen”. En el caso de la infertilidad asociada a la obesidad, se detecta más fácilmente en la mujer por las consecuencias directas sobre el ciclo menstrual, aunque especifica que “ocurre en ambos sexos por mecanismos distintos que incluyen, entre otros, factores hormonales y físicos”. La infertilidad femenina, entre los 30 y los 49 años, se sitúa en España en el 17,5% y alrededor del 23% de las mujeres que se somete a técnicas de fertilización in vitro tiene sobrepeso u obesidad. En cuanto al factor masculino, responde al 20-50% de los casos de infertilidad de pareja y la obesidad podría jugar un papel relevante.
En este sentido, la endocrinóloga Miñambres indica que “es esencial valorar el tratamiento más adecuado para planificar la gestación en el momento idóneo con el fin de conseguir mayores tasas de embarazo con las mínimas complicaciones posibles”. El principal reto en esta materia sigue siendo la prevención de la obesidad. La pérdida de peso mejora claramente las tasas de ovulación en mujeres con ovario poliquístico asociado a obesidad, pero la mejora en los parámetros espermáticos es menos clara en el varón.
Entre las propuestas incluidas en dicho documento también se encuentran visibilizar la necesidad de destinar recursos desde el Sistema Nacional de Salud para la creación de unidades multidisciplinares para el abordaje de la obesidad, tanto desde hospitales como desde la atención primaria; la necesidad de reducir las listas de espera de cirugía de la obesidad, valorar la financiación de los fármacos anti-obesidad y el desarrollo de estrategias dirigidas a la fertilidad de estos pacientes.