Por Julia Porras
18 de octubre de 2023Los programas de cribado poblacional reducen la morbilidad y la mortalidad prematuras del cáncer, ayudan a mejorar la supervivencia, resultan cruciales para abordar las desigualdades sociales y son eficaces cuando la población objetivo se determina de forma adecuada y los niveles de participación son elevados. Sin embargo, actualmente la edad de referencia para realizarse una mamografía en nuestro país está entre los 50 y los 69 años. Por ello, la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA) y las 47 asociaciones de mujeres que están integradas en ella aprovechan el marco del Día Internacional del Cáncer de Mama para hacer público su Manifiesto 2023, que recomienda ampliar desde los 45 a los 74 años la edad de las mujeres para hacerse una mamografía, en consonancia con el Plan Europeo de Lucha contra el cáncer y la puesta en marcha de protocolos para realizar el cribado de este tipo de cáncer también en varones.
El objetivo de este manifiesto, que cuenta con el apoyo de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y de los grupos cooperativos de investigación en cáncer de mama GEICAM y SOLTI, es el de poner sobre la mesa las necesidades de las mujeres con cáncer de mama y dar estrategias a las administraciones para que puedan atajarlas.
Desde FECMA, su presidenta María Antonia Gimón ha declarado que “sería deseable que España incorporara las recomendaciones del Plan Europeo de lucha contra el Cáncer a la Cartera de Servicios y Prestaciones de nuestro Sistema Nacional de Salud y para ello, FECMA entiende que sería útil un acuerdo vinculante en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud para esa incorporación y rigor para dotar a nuestro Sistema Nacional de Salud de los medios humanos y materiales para incorporar esas recomendaciones a los programas de cribado”.
FECMA incide en la importancia de la experiencia y los datos científicos, que confirman que la mamografía sigue siendo el mejor instrumento para detectar el cáncer de mama y es que, tal y como recoge el manifiesto, es previsible que en los próximos años aumente el número de casos de cáncer de mama y mejore la tasa de supervivencia de esta enfermedad que hoy es superior al 85%. Pero lo preocupante es que en el 6 % de los diagnósticos ya hay metástasis y que el 20%-30% de las pacientes desarrollará un cáncer de mama metastásico. Las pacientes con cáncer de mama son conscientes de las dificultades de superar esa metástasis, de ahí la urgencia de avanzar en la investigación para mejorar la supervivencia y calidad de vida de estas mujeres que necesitan una particular atención y un personal especializado.
Por su parte, la doctora Mafalda Oliveira, presidenta del grupo de investigación en cáncer SOLTI, ha concluido que “el cáncer es uno de los mayores problemas de salud pública y con tendencia al alza en el mundo, sin embargo, la mortalidad se ha reducido de manera significativa en los últimos 20 años debido, en gran parte, por el papel que juegan la investigación y la detección precoz. De hecho, un 70% del aumento de la supervivencia en cáncer es atribuible a los nuevos medicamentos. El tiempo y los recursos son claves para un abordaje óptimo de las patologías oncológicas, por ello recordamos que tan importante es investigar como garantizar un acceso eficiente y equitativo a los tratamientos que han demostrado efectividad y seguridad para impactar de forma significativa en la calidad de vida de las pacientes”.