Por Juan García
14 de octubre de 2024En materia de prevención, las campañas de vacunación son una de las principales herramientas del sistema sanitario. Aunque sus beneficios para la reducción de la incidencia y la gravedad de enfermedades infecciosas están harto comprobados, resulta complicado cuantificarlos. Por ello, la compañía farmacéutica GSK ha promovido un estudio para medir la relación coste-beneficio a nivel social del calendario vacunal en España, con sus distintas aplicaciones autonómicas, en el que concluyen que, por cada euro invertido en la vacunación, el retorno en términos de beneficio social es tres veces mayor.
El estudio, publicado en la revista Human Vaccines & Immunotherapeutics, midió la repercusión en términos sanitarios y económicos que implica vacunar a una cohorte de recién nacidos a lo largo de sus vidas, en comparación con no hacerlo. Para ello se han considerado dos escenarios: por un lado, el calendario de vacunación (CV) del año 2020 y, por otro, un CV ampliado, en el que se añadieron cuatro programas vacunales adicionales: rotavirus y meningococo B en la edad infantil, recuerdo de tosferina en mayores de 65 años y herpes zóster en mayores de 50 años, siendo este calendario bastante similar al que tenemos en 2024.
Las conclusiones de este estudio ponen de manifiesto que la inversión total para vacunar a esta población a lo largo de su vida, según el calendario de 2020, ascendería a 168,5 millones de euros y a 275,5 millones con el calendario ampliado, mientras que los potenciales beneficios serían de 772,2 y 803 millones de euros, respectivamente. Esto resulta, en términos comparativos, en una ratio de coste-beneficio social de 4,58 euros para el CV de 2020 y de 2,91 euros para el CV ampliado.
En concreto, la ratio asciende a 3,19 euros en el caso de la vacunación infantil y a 1,49 euros para la vacunación en adultos. Esta diferencia se debe a que los calendarios de vacunación pediátrica están más desarrollados y, al tratarse de niños, pueden beneficiarse de los efectos de las vacunas administradas a lo largo de toda una vida.
El doctor Alberto Pérez, director médico del Hospital Nuestra Señora De Sonsoles (Ávila) y autor del informe, comenta que “este estudio muestra cómo la vacunación a lo largo de la vida es una medida preventiva eficiente, con beneficios que compensan la inversión necesaria, y cuya eficiencia se mantiene con la inclusión de nuevas vacunas”. El doctor destaca en este sentido que “ahora somos capaces de poner cifras tanto a la inversión como al retorno económico que revierte a la sociedad la vacunación a lo largo de la vida”.
Su colega y también autora del estudio, la doctora María Fernández Prada, especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, enfatiza la necesidad de que las campañas de vacunación presten especial atención a las personas mayores, “quienes tienen un mayor riesgo de enfermedades infecciosas debido a la disminución de su inmunidad con la edad y cuyas necesidades sanitarias son mayores en el caso de precisar asistencia médica en el domicilio o en el hospital”.