El analizador Atellica VLTi, capaz de diagnosticar el infarto agudo de miocardio en ocho minutos

Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en España y en Europa. Cada día fallecen 326 personas, según los datos que ofrece el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con el fin de reducir esta cifra, Siemens Healthineers, proveedor mundial de equipos, soluciones y servicios sanitarios, ha puesto en marcha un analizador que es capaz de diagnosticar el infarto agudo de miocardio en ocho minutos en Urgencias. 

A partir del analizador Atellica VTLi, se pueden comprobar los niveles de troponina, que es el marcador de referencia para el diagnóstico del infarto agudo de miocardio. La troponina es una proteína que se encuentra en las células del músculo cardíaco y que, cuando estos se dañan, se libera al torrente sanguíneo, por lo que a medida que las lesiones cardíacas aumentan, pueden detectarse mayores cantidades de troponina. 

Según apunta Pedro Gargantilla, director médico de Medicina Responsable, este analizador “proporciona unos resultados similares a los del laboratorio convencional, pero con un tiempo de respuesta muy inferior, lo cual permite que se pueda llegar al diagnóstico del infarto agudo”. Esto es importante, ya que “cuanto menos se tarde en determinar sus niveles, con mayor precocidad se instaurará el tratamiento correcto”. Por ello, “este hecho es crucial en una patología en la que cada minuto cuenta para invertir las curvas de mortalidad”. 

Cómo detectar un infarto de miocardio 

Tal y como señala el doctor Gargantilla, evaluar con rapidez a un paciente ingresado en Urgencias con síntomas de infarto de miocardio puede resultar vital para su supervivencia. Para ello, es necesario realizar una serie de pruebas, con el objetivo de determinar si el paciente está sufriendo realmente un ataque cardíaco. Si finalmente resulta afirmativo, las pruebas deben continuar para saber de qué tipo es y cuál es el tratamiento que necesita. 

En este sentido, el protocolo supone una monitorización por electrocardiografía y una valoración de la troponina de lata sensibilidad; junto con el historial, la clínica del paciente y los factores de riesgo. 

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