Por Medicina Responsable
25 de junio de 2025El Ministerio de Sanidad ha presentado la hoja de ruta "Trabajo y salud mental", un informe técnico que reconoce el papel determinante del trabajo en la salud mental de la población y plantea estrategias específicas para prevenir, detectar y atender los trastornos mentales derivados de las condiciones laborales adversas.
Su objetivo es identificar el sufrimiento psíquico causado o agravado por las condiciones laborales, además de desarrollar documentos técnicos, acciones formativas y mecanismos de coordinación a distintos niveles, con el fin de promover cambios en el abordaje de estos problemas y prevenir su aparición.
"El informe nos propone algo tan básico como que en las consultas preguntemos por las condiciones laborales y que una parte de nuestra historia clínica tenga en cuenta las condiciones y condicionantes laborales", ha señalado la ministra de Sanidad, Mónica García, durante la presentación del documento Hoja de ruta para las administraciones sanitarias en España.
En el informe, que ha sido elaborado por el Ministerio de Sanidad a través del Comisionado de Salud Mental, ha participado un equipo multidisciplinar de académicos y catedráticos de medicina, sociología, filosofía, derecho laboral, epidemiología, políticas públicas y atención clínica.
El documento propone un modelo integral para el reconocimiento de los factores que afectan a la salud mental en el ámbito laboral mediante la formación de los equipos sanitarios, así como la creación de un sistema de vigilancia epidemiológica para codificar adecuadamente las sospechas de origen laboral. "Apuesta por coordinar la salud pública, la salud laboral y la Atención Primaria en una sola red, que no sean compartimentos estancos, sino que podamos hacer una red de cuidados dentro de todos estos elementos y alianzas con otros ministerios", ha manifestado la ministra García.
En el ámbito clínico, se establecen tres ejes de actuación: evaluación sistemática de las condiciones laborales del paciente; valoración de la sospecha de origen laboral del malestar; y codificación en la historia clínica mediante códigos Z. Estos códigos pertenecen a una categoría dentro de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) utilizada por profesionales de la salud para registrar factores que influyen en el estado de salud de una persona, aunque no sean enfermedades propiamente dichas. La inclusión en la historia clínica de la notificación se realizará con consentimiento expreso del paciente.
También subraya la importancia de superar una visión individualizada del sufrimiento psíquico, para centrarse en sus causas estructurales, y advierte sobre los efectos de la precariedad integral, una combinación de inestabilidad laboral, inseguridad económica y falta de protección social, que impacta de forma desproporcionada en mujeres, jóvenes, personas migrantes y sectores sociales más desfavorecidos.
En este contexto, la ministra de Sanidad ha recordado que, según el informe PRESME, que analiza la relación entre condiciones laborales y salud mental en la población ocupada de España, se podrían haber evitado 170.000 cuadros depresivos en el año 2022 si no existieran formas de precariedad laboral. Este también afirma que el 60% de los trabajadores expuestos a condiciones psicosociales negativas reportan síntomas de sufrimiento psíquico como ansiedad o depresión; y que hasta el 26% de los trastornos mentales comunes pueden atribuirse a condiciones laborales adversas. Además, son las mujeres las que presentan una prevalencia mayor de trastornos mentales relacionados con el trabajo.
Por su parte, la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha informado de que el coste económico de las patologías de salud mental en España es de 1,5 puntos del Producto Interior Bruto (PIB). "De esto nunca se habla, de la distorsión económica que supone no tener a la gente trabajadora cuidada, del ahorro y la inversión social que supondría no padecer en los centros de trabajo. Es verdad que esta pandemia no sólo está en España, es uno de los principales problemas de Europa, donde la media es de 1,2 puntos del PIB", explicaba Díaz.
Tras ello, ha defendido que "es que es la primera vez que el Gobierno señala que las condiciones de trabajo, y la precariedad incide de manera directa e indirecta en la salud mental de los seres humanos en España".