
Por Juan García
11 de diciembre de 2025Los médicos de toda España afrontan este jueves la tercera jornada de huelga de facultativos, que supone también la tercera convocatoria de paro en menos de seis meses en rechazo al Estatuto Marco que propone el Ministerio de Sanidad. La llamada de los sindicatos médicos ha contado nuevamente con el respaldo del Foro de la Profesión Médica, que aglutina a colegios médicos, sociedades científicas y organizaciones sindicales.
El Ministerio y los representantes del comité de huelga se vuelven a ver las caras este jueves en una nueva reunión en la cual la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA) esperan que se imponga “la voluntad de diálogo por ambas partes y el Ministerio recapacite”, aunque señalan que se mantiene el calendario de movilizaciones previsto. Una confianza que comparte el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), el doctor Tomás Cobo, quien subraya que es el momento de “sentarse, dialogar, ver las posturas y tratar de llegar a acuerdos”.
En conversación con Medicina Responsable, el doctor Cobo analiza las claves del descontento de los médicos con esta norma y que, según reconoce va más allá de la propia propuesta del estatuto, por el arrastre de un malestar acumulado en la profesión sobre sus condiciones laborales. El presidente de la OMC explica este estallido del colectivo a través de la huelga obedece a las “tres quiebras” a las que alude con frecuencia: la precariedad laboral, la dependencia del modelo retributivo de las guardias y la falta de tiempo para formación continuada. A esto se suma la “dilución de las profesiones sanitarias” que plantea el borrador del estatuto para los médicos por la reclasificación profesional propuesta, que incluye a enfermeras con título de especialista en la misma categoría que los médicos. Aunque recalca que la realidad asistencial actual se basa en un modelo “multidisciplinar” donde todas las profesiones sanitarias juegan un papel destacado, defiende que “el liderazgo y la última responsabilidad del acto médico” recae en los facultativos.
La petición de un estatuto propio para los médicos es uno de los grandes motivos de movilización de los facultativos, aunque el Ministerio rechaza esta petición. El doctor Cobo señala que esta petición “no es ningún invento, sino que es una realidad en otros países europeos. No lo planteamos como una ventaja corporativista, sino para recoger las particularidades que tiene el desempeño de la profesión médica”.
“El problema que tenemos es que las mesas de negociación se reúnen todos los sindicatos representativos del Sistema Nacional de Salud, pero los médicos al ser una minoría nunca alcanzamos el número adecuado para que se representen nuestras particularidades”, añade a este respecto. Así, lamenta la falta de poder de negociación directa que busca solventar el estatuto propio, ya que “finalmente nuestras condiciones de trabajo las terminan negociando otros profesionales sanitarios”.
De cara a esta negociación, Cobo resalta como claves el poner fin a la precariedad laboral de los médicos, la cotización de las guardias y la transformación del modelo retributivo para que el salario de los médicos no dependa tanto de estos turnos. Por este motivo, subraya la importancia de que el Ministerio logre generar “consenso” en el Consejo Interterritorial para mejorar las condiciones laborales de los médicos y acabar con las “competencias desleales entre comunidades” para captar profesionales.
La convocatoria de huelga ha coincidido con el acusado repunte de infecciones respiratorias, que esta temporada ha llegado de forma anticipada. La anulación de miles de consultas, pruebas diagnósticas y procesos quirúrgicos ha generado preocupación entre las administraciones sanitarias y pacientes, por los estragos de contar con menos efectivos en estos momentos de tensionamiento para los centros sanitarios.
Ante esta tesitura, el doctor Cobo sostiene que “los médicos que acuden a la huelga lo hacen con un nudo en el estómago” por las consecuencias para el sistema, pero destaca la necesidad de trasladarle a los pacientes el mensaje de que se cumplen los servicios mínimos para atender a la población.
A pesar de la adversidad de las negociaciones, el presidente de la OMC considera que este contexto ofrece “una gran oportunidad” para cambiar un estatuto que considera “obsoleto”.