Por Aurora Molina
17 de julio de 2024La situación de la sanidad en las autonomías de Ceuta y Melilla atraviesa un momento crítico. En abril de 2024 el Sindicato Médico de Ceuta ya había lanzado un comunicado alertando del complicado escenario por el que atravesaba la sanidad de la ciudad autónoma en ese momento.
Tres meses después, la situación no ha mejorado, de hecho, con el verano se ha complicado aún más. Actualmente solo hay un oncólogo disponible en Ceuta mientras que el otro disfruta de su periodo de vacaciones porque solo son dos; no hay especialistas de aparato digestivo; dermatología está cerrada y en Atención Primaria faltan más de 50 facultativos. Así lo afirma un comunicado de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), en el que denuncia “la crítica situación en la que se encuentra la sanidad y la falta de predisposición del Ministerio de Sanidad para abordar el problema” que atraviesan estos territorios.
En este documento, CESM resalta las “desafortunadas declaraciones” del subdirector general del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), Jesús Junquera, quien señaló que en periodo estival no habría problemas para atender a los pacientes en ambos territorios. Desde la Confederación rechazan estas afirmaciones alegando que el subdirector hizo “gala de un desconocimiento total de los graves problemas que padecen los profesionales de las ciudades autónomas, donde la sanidad pública está atravesando unas carencias que desde el Ministerio no se están abordando o se hace de la manera equivocada”. Pero no solo el CESM critica la calidad de la sanidad actual en Ceuta y Melilla, sino que la propia Unión Europea ha llegado a calificar sus sistemas sanitarios como “los peores de todo el Estado”, según recoge la Confederación en el comunicado. En este sentido, afirman, “el Parlamento Europeo dio luz verde a la petición de la Organización Médica Colegial (OMC) para intervenir en la situación sanitaria de ambas regiones”.
Para el sindicato la gestión de Ingesa no está a la altura de lo que requieren estas ciudades autónomas. “Parecen limitarse a contrarrestar cada denuncia sobre la falta de profesionales publicitando la inversión millonaria en infraestructuras o medicamentos mientras ni siquiera existen profesionales para manejarlos”, señalan. Por esta razón, desde el CESM insisten en que “no se han buscado soluciones conjuntas y realistas para la grave situación de ambas ciudades” y piden la dimisión “de los directores territoriales de Ingesa por su patente desconocimiento del área que deben gestionar”. Resulta imprescindible que “la ministra de Sanidad conozca de primera mano la situación de los profesionales” sin dejarse influir, tanto ella como los máximos responsables del Ministerio, “por declaraciones de responsables locales muy alejadas de la realidad”.