Por Medicina Responsable
16 de febrero de 2024La situación del sistema sanitario gallego ha tenido un peso considerable durante la campaña electoral, algo que se ha reflejado en las propuestas electorales de los diferentes partidos. Estas serán las primeras elecciones a las que se enfrenten tanto el nuevo dirigente del PP gallego, Alfonso Rueda, como el actual consejero de Sanidad de la Xunta, Julio García Comesaña, que se incorporó al cargo en plena crisis pandémica en 2020. El modelo sanitario del actual gobierno autonómico del PP será puesto a prueba en estos comicios, tras gobernar los populares en la comunidad de forma ininterrumpida desde 2009. Las encuestas le vuelven a dar la victoria, con la duda de si alcanzará los 38 diputados necesarios para alcanzar la mayoría absoluta.
La sanidad ha jugado un papel protagonista en la campaña electoral gallega. La semana pasada tuvo lugar una manifestación convocada por la plataforma SOS Sanidade Publica a la que acudieron los líderes de los partidos de la oposición. Desde el ejecutivo se defendieron de estas protestas criticando el “uso partidista de la izquierda” de la sanidad al convocar estas protestas con una “intención electoralista y politizada”, según declaró el presidente Alfonso Rueda. Las reclamaciones presentes en esta manifestación se centraron en pedir mejoras para dar solución a la "saturación" de la Atención Primaria, a la falta de especialistas y a las listas de espera.
En cuanto a las listas de espera, el gobierno de la Xunta presumía a finales del año pasado de situarse como la segunda comunidad con menores listas de espera para intervenciones quirúrgicas, solo por detrás de Madrid. Así, el tiempo medio de espera para cirugías en Galicia era de 66 días, según el Barómetro Sanitario de noviembre, cuando el promedio estatal estaba en 112.
En una entrevista para Medicina Responsable, el consejero de Sanidad gallego achacaba los problemas de la Atención Primaria (AP) a la falta de especialistas y a un modelo deficiente a nivel nacional. “Para retener y fidelizar a los sanitarios también se quieren diseñar procesos específicos de promoción interna o aprobar modelos de pago por objetivos en todas las categorías”, señalaba. El consejero también destacaba la necesidad de formar a más médicos en medicina familiar y comunitaria y la colaboración con la sanidad privada.
Entre las propuestas en materia de sanidad para estas elecciones, el PP gallego hacen énfasis en la simplificación de los trámites sanitarios, la atención a las personas mayores y los pacientes crónicos con la asistencia domiciliaria o la estabilización de las plazas de empleo público. Una de las medidas estrella que propone el actual gobierno de cara a la próxima legislatura es el acceso gratuito al sistema sanitario para todos los emigrantes retornados.
Así, en su programa recogen un plan plurianual para la oferta de plazas de empleo sanitario público, la creación de un nuevo modelo de personal administrativo, el establecimiento de personal de geriatría en los centros de AP o un refuerzo de la atención a los pacientes crónicos a domicilio. También se comprometen a incorporar nuevas vacunas a su calendario “para mantener el liderazgo en España”. Otras medidas son la creación de una octava área sanitaria en Santiago con sede en el Hospital Gil Casares “con profesionales y tecnología de última generación para dar apoyo al resto de hospitales gallegos” o la ampliación de la cobertura a la reproducción asistida para mujeres mayores de 40 años.
La multitudinaria manifestación en la plaza del Obradoiro del pasado domingo reunió a más de 10.000 asistentes entre los que se encontraban los líderes de los principales partidos de izquierdas Ana Pontón (BNG), José Ramón Gómez Besteiro (PSdeG), Marta Lois (Sumar) e Isabel Faraldo (Podemos). Los convocantes señalaban que la actual situación de la sanidad la deja “herida de muerte”, poniendo el foco en la AP y en las listas de espera, algo de lo que estos partidos se han hecho eco en sus propuestas electorales.
Los programas de estos partidos coinciden en prometer una reducción de las listas de espera, la convocatoria de más plazas en AP y la elaboración de planes específicos para la salud mental. Además, recogen otras propuestas como planes de conciliación laboral e incentivos para áreas difíciles de cubrir o el refuerzo de la especialidad de pediatría en AP.