Por Juan Abarca, presidente de IDIS
1 de abril de 2025A colación de las noticias publicadas estas semanas sobre las restricciones para el acceso de tratamientos oncológicos en la Sanidad privada, hoy La Razón publica un estudio de la mano de Marta de Andrés Aguilar en el que explica que, esas restricciones por motivos de coste-eficiencia, se producen con normalidad tanto en la Sanidad privada como en la Sanidad pública en diferentes niveles nacionales, autonómicos e incluso a nivel de cada propio hospital.
Es decir, no es ni por ventilar las carencias de nuestro sistema sanitario público, ni por quitarle importancia a si ha habido practicas irregulares puntuales en el sector privado, que tocará analizarlas y ponerlas a disposición de quien corresponda llegado el caso.
Lo reproduzco con la única intención de que, tal y como trataba de explicar estos días, no todas las prescripciones pueden quedar al arbitrio únicamente de la indicación de los profesionales si no que éstas están sometidas o condicionadas por otros muchos criterios relacionados con el coste-efectividad en todos los entornos.
Cada paciente es un caso particular y desgraciadamente hay que asumir que no siempre es posible, por diferentes motivos relacionados con su situación o la propia sostenibilidad del sistema, que todo los pacientes sean susceptibles o tengan indicación para recibirla. Y esto debemos de conocerlo, entenderlo y asumirlo como sociedad.
Espero que ésto ayude a entender un poco mejor como funcionan las cosas. Vivimos en un contexto que frente a la pretensión de que todo el mundo tiene derecho a todo, en cualquier momento, la realidad es que las cosas no son tan sencillas e intervienen muchos otros factores que hacen que no siempre pueda ser así.