Por Juan Abarca, presidente de IDIS
29 de enero de 2025Pendiente de revisar la letra pequeña de las condiciones modificadas de la segunda licitación del concurso para la asistencia sanitaria de Muface -y esperando que no haya sorpresas porque ya sabe el gobierno lo que pasaría- parece que se puede haber llegado a un acuerdo entre las aseguradoras y el gobierno.
Tal y como se sugirió por parte de las primeras, además de diferenciar la prima por tramos de edad para compensar el envejecimiento del colectivo, habrá que esperar los tramos en que se distribuye, se incrementa la prima un 41,2% para estos próximos tres años; es decir, hasta 31 de diciembre del 2027.
Sin duda es un gran esfuerzo que hay que apreciar por parte del gobierno y que debe permitir, a priori, que se deban de poder compensar las pérdidas que acumula anualmente el modelo. Lo suficiente, incluso, como para que la tercera en discordia, DKV Belgium, pueda replantearse su vuelta y, porque no o quizás, haya alguna otra aseguradora que se atreva a meterse en el modelo.
No obstante hay que decir que para consuelo de los detractores de esta fórmula de colaboración público-privada -aunque no estarán de acuerdo-, sobre el papel al menos, sigue habiendo una diferencia significativa con respecto a la prima por asegurado que se paga en la actualidad en el SNS. Así, en el año 2024, mientras que en el servicio público el gasto medio era de 1.736 euros, a lo que habrá que ir incrementando el gasto sanitario de estos próximos tres años, apenas se abonaba por los funcionario 1.030 euros. Es decir que lo más que previsible es que en 2027 la prima por los funcionarios se haya quedado en unos 1.400 euros mientras que la prima anual por los pacientes del SNS supere ya ampliamente los 2.000 euros por año. Lo que quiere decir que dentro de tres años necesitaremos otro buen empujón para volver a compensar y tendremos lío otra vez…. Y una nueva oportunidad para los que quieran que el modelo desaparezca, que lo acabe haciendo.
Pero disfrutemos del momento… al menos hasta que se cierre la licitación y se presenten las propuestas que tras 4 meses de incertumbre, angustia y preocupación por parte de los diferentes agentes y sobre todo de los pacientes afectados, parece que las cosas han llegado a buen puerto y van a seguir adelante como hasta ahora.
Y ahora queda pendiente la negociación de las aseguradoras con los diferentes proveedores y profesionales a fin de compensar, también, las diferencias con respecto a las tarifas y honorarios que se han venido abonando con respecto al resto de asegurados del sector -segun la patronal ASPE entre un 10 y un 15%- porque el modelo lo hemos ido manteniendo entre todos estos años y todos tendremos que poder salir beneficiados de esta oferta del mismo modo.
Otra cosa no sería justa ni parecería razonable.