Por Gema Puerto
28 de abril de 2022La profesión de la enfermería a veces puede ser una paradoja. Sobre todo, cuando son los propios profesionales los que enferman y son sus compañeros los que les tienen que cuidar. Eso ocurre cuando las enfermeras se pinchan accidentalmente con inyecciones de enfermos de Sida o hepatitis B, cuando manejan medicamentos peligrosos que provocan cáncer, cuando sufren problemas de fertilidad o sufren agresiones por parte de pacientes insatisfechos.
Pero estos no son los únicos riesgos de los enfermeros de nuestro país. Estos profesionales padecen una carga excesiva de trabajo que se refleja en problemas de salud mental y tienen problemas de conciliación.
Con motivo del Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, el organismo que representa a las 325.000 enfermeras de España insta a las administraciones a que se comprometan a regular normas específicas para salvaguardar la seguridad de los profesionales.
“Es fundamental que las instituciones pongan todas las medidas necesarias para proteger la salud y la seguridad de todos los profesionales en todos los estratos de la sanidad, y deben hacerlo con normas de obligado cumplimiento”, afirma Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería (CGE).
“El número de enfermeros trabajando en los servicios de prevención de riesgos de las empresas debería duplicarse, pues ni siquiera todas las enfermeras con el título de especialista -unas 8.000- ejercen como tales”, sostiene Araceli Santos, presidenta de la Asociación de Enfermería en el Trabajo (AET).
El Consejo General de Enfermería recuerda las dificultades a las que se enfrentaron, y continúan enfrentándose, las 325.000 enfermeras de España, y exige al Gobierno central y a los autonómicos que pongan en valor este trabajo incansable, así como que aseguren la protección de las enfermeras, para lo que deben comprometerse a regular normas específicas para salvaguardar la seguridad de los profesionales.
La pandemia por COVID-19 ha visibilizado enormemente el trabajo de todos los sanitarios en general y de las enfermeras en particular. “La crisis que estamos viviendo ha puesto de manifiesto la necesidad de cuidar y respetar el capital humano que existe en nuestro sistema sanitario. Es fundamental que las instituciones pongan todas las medidas necesarias para proteger la salud y la seguridad de todos los profesionales en todos los estratos de la sanidad y deben hacerlo con normas de obligado cumplimiento”, afirma Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.