Por Julia Porras
19 de enero de 2024Mañana tendrán lugar las pruebas selectivas de Formación Sanitaria Especializada para la convocatoria 2023/2024, una convocatoria en la que se han ofertado un total de 11.607 plazas, lo que supone un aumento del 3,5% con respecto al año anterior. Del total de estas plazas, 8.767 corresponden a la especialidad de Medicina, y a ellas optan 13.966 aspirantes. El resto son para Enfermería, Farmacia, Psicología, Biología, Física y Química.
Los participantes admitidos también han aumentado en un 8%, llegando a la cifra de 30.028. En cuanto a las plazas de Medicina de Familia, una de las especialidades menos demandas en las últimas convocatorias debido a sus poco atractivas condiciones laborales, Sanidad ha ofertado 8.772 plazas, lo que supone un aumento del 2,6% con respecto a la convocatoria anterior.
Esta medida, según los profesionales, es positiva, pero no es suficiente. Para Maria Jose Gamero, vocal de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Médicos de Familia, Semergen, “es una idea muy buena por parte del ministerio. Ampliar esta oferta en Medicina de Familia, pero además es necesario que los egresados (estudiantes que han terminado su carrera) sepan que van a tener garantizada una formación especializada buena y que tendrán luego un puesto de trabajo que puedan conciliar con su vida personal”.
Es importante que al futuro Médico de Familia se le ofrezca una formación en un lugar donde pueda tener una vida buena, explica la doctora Gamero, , “porque si te llevas a un chico de 24 o 25 años a un pueblo perdido, lejos de su vida, y que tiene que hacer 30 o 40 kilómetros al día, pierde todo el interés por su puesto, claramente”. Eso con las especialidades como cardiología no pasa, porque generalmente esta formación está garantizada en hospitales de centros urbanos. Además, aclara, “tenemos que ofrecer a los MIR una formación con buenos tutores que puedan dedicarles tiempo y en lugares de residencia que sean interesantes para ellos y les permitan conciliar su vida y su profesión”, insiste.
Mejorar las condiciones de trabajo
Por otro lado, la precariedad del trabajo diario de los médicos de familia tampoco ayuda: “Consultas saturadas, con más de 50 pacientes que atender al día, precariedad salarial. Cosas muy poco atractivas para un médico que empieza su camino”, dice la doctora Gamero.
Para la Vocal de Semergen la solución a esta situación pasa por explicar a los jóvenes MIR y futuros profesionales que “ser médico de familia tiene muchas ventajas, como por ejemplo una amplia gama de actuaciones, que no solo tiene un aspecto asistencial, sino que también tienen una vertiente de investigación y además tiene el componente emocional de poder tener continuidad con los pacientes, ya que te permite un contacto muy cercano”, asegura la doctora Gamero.
Aun así, la doctora es optimista frente a los resultados de esta nueva convocatoria ya que, “gracias a la labor de Sociedades Científicas como Semergen y otras que hemos puesto empeño porque esta asignatura tenga más peso en las Universidades, parece que la semilla del cambio está ahí. Así que tenemos la esperanza de que los futuros médicos hayan conocido un poco más la Medicina de Familia y la elijan para desarrollar su carrera en todos los aspectos en esta especialidad”.