Por Andrea Rivero
4 de mayo de 2023Miles de mujeres han notificado haber sufrido algún trastorno menstrual tras haberse vacunado contra el SARS-CoV-2. Algunos estudios incluso habían confirmado que existía una relación con el aumento del sangrado menstrual. Sin embargo, ahora una investigación sueca ha analizado a cerca de tres millones de mujeres y ha concluido que no encuentran pruebas concluyentes de que haya un mayor riesgo de sufrir cambios menstruales tras la vacunación.
Sangrado abundante durante la menstruación, periodo frecuente e irregular o ausencia de este son algunos de los trastornos que muchas mujeres han experimentado tras haberse vacunado contra la Covid. En este sentido, los investigadores en su estudio, publicado en la revista científica The BMJ, han aclarado que “los ciclos menstruales varían naturalmente y los trastornos menstruales menores generalmente no se consideran de importancia clínica. Sin embargo, estos cambios pueden generar una angustia considerable en las mujeres afectadas, especialmente durante una campaña de vacunación masiva, cuando surgen preocupaciones sobre reacciones adversas que podrían no estar bien caracterizadas”.
Siguiendo esta premisa, los investigadores incluyeron a 2.946.448 mujeres suecas de entre 12 y 74 años en su estudio y les realizaron un seguimiento de dos periodos tras haberse vacunado con alguna de las vacunas más comercializadas (Pfizer, Moderna y AstraZeneca), uno durante los primeros siete días después de la vacunación y otro durante los siguientes 90 días.
Los resultados que extrajeron fueron claros: en cuanto al riesgo de hemorragia posmenopáusica observaron un aumento del riesgo del 23-33% durante los ocho y 90 días tras la vacunación con las vacunas de Pfizer-BioNTech y Moderna después de la tercera dosis. No obstante, con la vacuna Oxford-AstraZeneca la asociación fue menos clara. Por otro lado, en las mujeres premenopáusicas, encontraron asociaciones débiles para las alteraciones menstruales o hemorragias después de cualquier dosis de la vacuna, entre un 13% y un 8% en los primeros siete días y entre un 6 y un 1% entre los ocho y 90 días.
Los investigadores concluyeron que “las asociaciones fueron débiles e inconsistentes entre la vacunación contra el SARS-CoV-2 y los contactos de atención médica por sangrado en mujeres posmenopáusicas”. Además, registraron “incluso menos evidencia de asociación” para trastornos menstruales o sangrado en mujeres premenopáusicas.