Por Julia Porras
23 de octubre de 2023El Hospital público 12 de Octubre de la Comunidad de Madrid ha liderado un estudio, presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Oncología, ESMO 2023, celebrado en Madrid del 20 al 24 de octubre, que analiza un nuevo tratamiento frente al cáncer de pulmón de células pequeñas que mejora la supervivencia del paciente. Se trata de un estudio en fase II que ha demostrado, en 220 pacientes, la eficacia de la primera molécula activadora de las células inmunitarias, células T, frente al cáncer de pulmón de células pequeñas. El trabajo ha sido publicado en la revista “The New England Journal of Medicine”.
Este tratamiento farmacológico de la biotecnológica Amgen, llamado tarlatamab, se administra por vía intravenosa una vez cada 1 o 2 semanas y pertenece a una clase de fármacos denominados activadores de células T bi-específicos. Recibe su nombre porque consta de dos extremos específicos: un extremo se une a una proteína específica (antígeno, en este caso una molécula llamada DLL3) que se encuentra en las células tumorales, mientras que el otro extremo también se une, a través del receptor CD3, a una de las células inmunitarias del paciente (célula T).
Según el doctor Luis Paz-Ares, investigador del ensayo, jefe de Servicio de Oncología del Hospital 12 de Octubre y director de la Unidad de Investigación en cáncer de pulmón CNIO-H12O, el tarlatamab conecta como un puente o “una celestina” la célula tumoral con las propias células T del paciente, que usan una variedad de mecanismos para atacar y destruir la célula cancerosa. La diana de la molécula tumoral, conocida como DLL3, se puede encontrar en niveles elevados en los tumores de pulmón de células pequeñas, pero rara vez está presente en el tejido normal. De esta forma, la acción de tarlatamab tiene efectos adversos limitados en el resto del organismo. Ofrece así a los pacientes “una nueva oportunidad terapéutica efectiva con un perfil de seguridad bastante favorable”.
El cáncer de pulmón de células pequeñas es una neoplasia maligna agresiva, que supone el 15% de los tumores de pulmón y que tiene unas opciones de tratamiento limitadas y una tasa de supervivencia a los 3 años del 6% para pacientes con este tipo de tumor en estadio diseminado. El estudio demuestra que tarlatamab tiene el potencial de cambiar el manejo clínico del cáncer recurrente/refractario y mejorar la supervivencia en un año de los pacientes con esta enfermedad.
Una vez se cuenta con la dosis y el esquema terapéutico idóneo para el desarrollo de esta investigación, podría solicitarse la aprobación por las agencias FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos) y EMA (Agencia Europea del Medicamento), aunque los resultados definitivos de que esta medicación es mejor que la actual vendrá por el ensayo en fase III que ya está en marcha. “Posteriormente, una vez demostrada que la estrategia terapéutica es eficaz en etapas más tardías de la enfermedad, iremos a momentos más tempranos de la enfermedad” ha concluido el doctor Paz-Ares quien también está seguro de que esta investigación redundará en el desarrollo de medicaciones de este tipo en otros tumores sólidos, cáncer de pulmón y otros.
El doctor Paz-Ares ha señalado por otra parte que ha habido muy pocos cambios en el tratamiento de este tumor en las últimas décadas, por lo que “disponer de este fármaco es una noticia importante para los pacientes y para los médicos que tratamos esta enfermedad. Es el nacimiento de una nueva terapia”.