Por Andrea Martín
12 de enero de 2023En julio de 2016, con tan solo 17 meses de edad, Blanca fue diagnosticada de un tumor rabdoide maligno en el Hospital Sant Joan de Déu. Durante dos años, la pequeña se sometió a un tratamiento de quimioterapia muy agresivo, a tres intervenciones quirúrgicas para extirparle el tumor y viajó a Alemania para recibir terapia de protones. Finalmente, todo acabo bien y lograron salvar la vida de la pequeña, pero con algunas secuelas.
Ahora, gracias al impulso que inició hace dos años la familia para fomentar la investigación de esta enfermedad, la investigadora del Pediatric Cancer Center Barcelona, del Hospital San Joan de Déu, Alexandra Avgustinova, ha obtenido una beca de excelencia del Consejo Europeo de Investigación (ERC), que tendrá una duración de cinco años, con el objetivo de hallar el origen de este tipo de tumores.
Los tumores rabdoides malignos se diagnostican en niños pequeños en torno a los 15 meses de edad. Estos suelen formarse en el riñón o en el sistema nervioso central, aunque también se forma en los tejidos blandos de otras partes del cuerpo. Los tumores rabdoides tienden a crecer rápido, son difíciles de tratar y su pronóstico es precario.
El proyecto, a diferencia de los que buscan hallar un fármaco para combatir el tumor, se centra en el origen de éste para comprender cómo se forma y sobrevive la primera célula tumoral, es decir, entender qué ha podido producir un tumor de esas condiciones. Según la doctora Avgustinova, “esta investigación busca comprender mejor por qué determinadas células con mutaciones oncogénicas son capaces de originar un tumor rabdoide y otras no durante el desarrollo embrionario”.
La doctora Avgustinova espera que los resultados de la investigación no solo aporten luz al conocimiento de los tumores rabdoides malignos, sino que sean extrapolables a otros cánceres pediátricos y supongan el primer paso hacia un cambio en el estudio de los tumores pediátricos y sus tratamientos.