Por Sergio Díaz
18 de octubre de 2024Un estudio publicado en la revista Nature Medicine y dirigido por la Universidad de Oxford, en colaboración con el instituto IrsiCaixa, ha revelado que cinco niños nacidos con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) en Sudáfrica han logrado mantener el virus indetectable en su sangre sin necesidad de tratamiento antirretroviral. Este hallazgo ofrece nuevas esperanzas en el desarrollo de terapias que permitan controlar el VIH sin necesidad de medicamentos de por vida.
El tratamiento antirretroviral es el conjunto de fármacos utilizados para combatir el sida. Su función principal es evitar que el virus se multiplique y cause daños en el sistema inmunitario. Estos medicamentos no eliminan el virus por completo, pero reducen su presencia en el cuerpo, lo que permite que la persona mantenga una buena salud y prevenga la transmisión del virus a otras personas. Para la mayoría de las personas con VIH, dejar este tratamiento puede provocar que el virus vuelva a multiplicarse, pero en el caso de estos cinco niños, esto no ha ocurrido.
El hallazgo se basa en el seguimiento de 284 bebés que nacieron infectados con el VIH y que recibieron tratamiento antirretroviral desde el nacimiento, sin embargo, estos cinco niños han logrado controlar el virus. Los investigadores creen que esto se debe a que el virus en sus cuerpos es menos agresivo, lo que significa que no se reproduce con tanta facilidad, y también es más vulnerable a la respuesta del sistema inmunitario innato, que es la primera línea de defensa del cuerpo contra infecciones.
Un aspecto llamativo de la investigación es que los cinco casos de control excepcional del virus se dieron solo en niños, aunque el 60% de los recién nacidos en el estudio eran niñas. Esto sugiere que hay diferencias importantes entre los sexos en la forma en que el cuerpo combate el VIH.
También destacan que en estudios anteriores ya habían mostrado que los niños tienden a tener una resistencia natural al VIH mayor que las niñas. Esta resistencia se debe a que los fetos masculinos tienen menos células T CD4 activadas. Estas células son cruciales para el sistema inmunitario y son el principal objetivo del VIH cuando infecta a una persona. Al tener menos células CD4 activadas, el virus encuentra más dificultades para multiplicarse.
Además, el estudio asegura que el virus que infecta a los niños es más sensible al interferón, una proteína que el cuerpo produce como respuesta ante virus. Los expertos aseguran que esto podría explicar por qué estos niños han sido capaces de controlar el VIH de manera natural sin necesidad de seguir tomando los medicamentos.
Esta investigación es importante porque podría abrir la puerta a nuevas formas de tratar el sida, especialmente entre los más pequeños. Actualmente, solo el 58% de los niños con VIH en el mundo tienen acceso a un tratamiento adecuado. Si se logra desarrollar terapias que aprovechen las ventajas del sistema inmunitario innato, como las que se han observado en estos cinco niños, podría ser posible controlar el virus sin la necesidad de tomar medicamentos diariamente, lo que mejoraría la calidad de vida de los pacientes.