Por Medicina Responsable
19 de agosto de 2025Un nuevo estudio de la Universidad de Birmingham (Reino Unido) ha revelado que las células del cuerpo cambian su forma para cerrar espacios como las heridas. De esta manera, si la brecha se curva hacia afuera (de manera convexa), los retículos endoplasmáticos (RE) forman estructuras tubulares; pero cuando se curva hacia adentro (cóncava), crean patrones planos en forma de lámina.
Además, los investigadores descubrieron que las fuerzas de empuje en los bordes curvados hacia afuera y las fuerzas de tracción en los bordes curvados hacia adentro cambian la forma del RE a través de diferentes mecanismos: cuando un espacio tiene bordes convexos, las células utilizan un movimiento de arrastre con extensiones anchas y planas, pero en el caso de los bordes cóncavos se produce un movimiento de bolsa, en el que las células se contraen para juntar los bordes.
En su artículo publicado en la revista Nature Cell Biology, investigadores del Reino Unido y la India señalan que la capacidad del RE para reorganizarse en respuesta a la curvatura de los bordes y determinar el modo de migración epitelial pone de relieve su papel crucial en el comportamiento celular.
Las células epiteliales recubren las superficies internas y externas del cuerpo, formando una barrera que protege contra daños físicos, patógenos y deshidratación. Desempeñan un papel fundamental en la absorción de nutrientes y la eliminación de productos de desecho, así como en la producción de sustancias como enzimas y hormonas.
Para dar con este hallazgo, los científicos utilizaron técnicas especializadas para crear pequeños huecos en las capas celulares y emplearon modelos matemáticos y de imagen avanzados para comprender cómo el ER cambia de forma y ayuda a las células epiteliales a moverse.
"La cicatrización de las heridas es una respuesta importante a las lesiones. Nuestro estudio abre nuevas vías para explorar los mecanismos que subyacen al cierre de los huecos epiteliales y sus implicaciones más amplias para la salud y la enfermedad, al identificar una nueva función del RE en este proceso", ha indicado Simran Rawal, del Instituto Tata de Investigación Fundamental de Hyderabad (India), que realizó la mayor parte de los experimentos.
"El papel del RE en el movimiento celular no es solo un descubrimiento científico fascinante, sino también un potencial cambio revolucionario para diversos tratamientos y terapias médicas. El uso de modelos matemáticos para comprender cómo se reparan las células puede conducir a mejores tratamientos para las heridas, nuevos métodos para regenerar tejidos dañados o una mejor comprensión de cómo se propagan las células cancerosas, lo que daría lugar a nuevas estrategias para prevenir o ralentizar la metástasis", ha apuntado el doctor Pradeep Keshavanarayana, que desarrolló el modelo matemático cuando era investigador en la Universidad de Birmingham.