Por Virginia Delgado
5 de agosto de 2024El anisakis es un parásito que puede encontrarse en el pescado y en los cefalópodos (calamar, pulpo o sepia). Su transmisión a las personas se produce cuando se consumen crudos o poco cocinados, provocando alteraciones digestivas y reacciones, como urticaria, angioedema, asma y anafilaxia.
Un estudio de investigadores españoles ha relacionado por primera vez a este gusano nematodo con las personas que padecen cáncer de colon, confirmando que estos enfermos tienen niveles más altos de anticuerpos frente al parásito.
La investigación ha sido liderada por la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana de la Conselleria de Sanidad (Fisabio) y la Universidad Complutense de Madrid (UCM), y se ha llevado a cabo con 92 pacientes del Hospital Arnau de Vilanova de Valencia y 60 personas sanas.
Como ha explicado la profesora Carmen Cuéllar, investigadora de departamento de Microbiología y Parasitología de la UCM, los resultados indican que “estos pacientes han entrado en contacto con las larvas de este parásito en mayor medida que el resto de la población, lo que sugiere una asociación entre anisakis y el cáncer de colon”.
La inflamación crónica, como resultado de una infección persistente puede provocar daños en el ADN, mayor expresión de oncogenes, disminución de la apoptosis (proceso de muerte celular) e inmunosupresión. Al ser estas algunas de las razones de la inducción del cáncer, el equipo de investigadores se planteó la hipótesis de la relación. “Las respuestas celulares a los productos liberados por las larvas de anisakis podrían provocar inflamación y daño al ADN. Hace más de tres décadas, ya incluso se postulaba que anisakis pudiera estar relacionado con el cáncer gástrico, comprobándose el potencial tumorigénico de los productos liberados por las larvas, pero hasta la fecha no había evidencias que sugirieran una relación entre este parásito del pescado y el cáncer de colon”, ha manifestado la doctora Cuéllar.
En la primera parte de la investigación, que se desarrolló en el Hospital Arnau de Vilanova, se procedió al examen de los linfocitos T, que son células de la sangre que ayudan a proteger al cuerpo de infecciones y a combatir el cáncer. Después, se hizo una evaluación de la apoptosis (destrucción o muerte celular programada o provocada por el organismo).
En siguiente fase, llevada a cabo en el laboratorio del Departamento de Microbiología y Parasitología de la UCM, se preparó el antígeno de larvas de anisakis extraídas de bacaladillas y se realizó la determinación de anticuerpos específicos en el suero de personas con cáncer de colon y en el del grupo de control sano.
"En nuestro grupo ya habíamos descrito correlaciones entre algunos parásitos y el cáncer de colon; incluso en las fases tempranas y premalignas. Este estudio revela la posibilidad de identificar personas con una mayor susceptibilidad a la enfermedad y el potencial de generar nuevos mecanismos para prevenirla”, ha explica el doctor Antonio Llombart Cussac, responsable del Ggrupo de oncología clínica y molecular de Fisabio en el Hospital Arnau de Vilanova.