Por Andrea Rivero
18 de octubre de 2023Paracetamol, ibuprofeno, acetilcisteína, lidocaína… estos son algunos de los 962 medicamentos que se encuentran actualmente en la lista de fármacos con problemas de suministro de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Son cerca de mil medicamentos, algunos de ellos muy habituales, que tienen unidades limitadas en nuestro país. Pero ¿por qué ocurre esto? Los expertos señalan que existen varios factores que están complicando esta situación, desde la deslocalización de la fabricación de los fármacos, hasta las fluctuaciones al alza en la demanda de algunos medicamentos que no se esperaba que fuesen tan solicitados, como ha ocurrido con el medicamento para la diabetes ozempic.
“El problema que estamos teniendo con la escasez de medicamentos no solo afecta a España, también a todos los países de nuestro entorno y las causas son conocidas y muy variables”, explica a Medicina Responsable Juan Pedro Rísquez, vicepresidente del Consejo General de Colegios Farmacéutico de España, quien además añade que la mayoría de las causas, “están vinculadas a procesos de fabricación, porque las empresas fabricantes de principios activos están muy deslocalizadas en países del este y la India. Además de otros problemas, como las tensiones en la adquisición de materias primas, como consecuencia de la guerra de Ucrania”.
La falta de medicamentos es un problema que, según Rísquez, viene desarrollándose desde hace bastantes años, “pero ahora no estamos en una situación peor que antes”. Desde Farmaindustria insisten en que, a pesar de este desabastecimiento en España, la inmensa mayoría de los problemas de suministro no tienen ningún impacto en el paciente porque hay alternativas terapéuticas y, además, porque las compañías farmacéuticas tienen planes de contingencia para estos casos. En esto concuerda Rísquez, que indica que “el año pasado hubo un repunte importante de falta de suministro de algunos medicamentos, pero desde mediados de este año la situación está tendiendo a mejorar”.
Causas del desabastecimiento
El origen de los problemas de suministro es multifactorial, ya que confluyen multitud de circunstancias. Desde Farmaindustria nos señalan las causas que generan este problema:
-Problemas técnicos que se dan, por ejemplo, cuando falta algún elemento para poder poner en el mercado un medicamento, sea principio activo o materiales para fabricar el envase o alguno de los componentes.
-Causas administrativas que afectan a los medicamentos por encima de otros productos de consumo, ya que están altamente regulados y cualquier modificación en aspectos como la información del etiquetado y prospecto, las condiciones de prescripción y dispensación, los lugares de producción y control, etc., necesita autorización administrativa y la comercialización debe ajustarse siempre a dicha autorización.
-Razones derivadas de la comercialización que pueden deberse a la ausencia súbita o no comercialización motivada por una crisis sanitaria como la de la Covid-19 o por la inviabilidad de mantener la producción de un medicamento por el coste del fármaco.
-Comercio paralelo derivado del bajo precio de determinados medicamentos en nuestro país que invita a los mayoristas a exportar selectivamente productos a otros países donde los precios son mayores.
-Por último, la estacionalidad, que puede multiplicar la demanda de determinados fármacos en momentos puntuales.
Las autoridades sanitarias europeas y nacionales están implicándose, junto con la cadena de medicamentos que compone la industria, la distribución y la farmacia, para aminorar el impacto de este problema de suministro. Sin embargo, Rísquez señala que, “son medidas que no tienen un efecto inmediato, por ello tenemos que pensar que para modificar este proceso de deslocalización hay que potenciar y tener reservas de fabricación para medicamentos estratégicos en España y en Europa. Pero, para todo eso, hay que fomentar que la industria farmacéutica no esté tan deslocalizada y que este proceso de globalización, con lo que hemos aprendido en la pandemia, nos ayude a mejorar y no suponga problemas”. Farmaindustria destaca que la AEMPS está muy sensibilizada en la protección de presentaciones que se consideran críticas y que no debería faltar en nuestro mercado, es decir, los medicamentos estratégicos, que son, a su vez, muy vulnerables al suministro por estar comercializadas por un solo titular de la autorización de comercialización o por dos, como máximo.
En cualquier caso, hasta que esas medidas tengan impacto, los farmacéuticos son los que están en primeria línea. Rísquez destaca que, “en 9 de cada 10 casos un problema que afecta a un medicamento lo resuelve el farmacéutico haciendo una sustitución con otra presentación de igual composición, con lo cual el tratamiento se mantiene inalterado. Otra cuestión es cuando no hay un sustituto, que ya es un porcentaje mucho menor, y que entonces sí que hay que derivar al paciente al médico para que este valore la implantación de otro tratamiento que sea similar o parecido”.