Por Clara Arrabal
26 de mayo de 2025“Estoy ante tres especialistas en gestión de recursos humanos en sanidad”. Así ha presentado Antonio Herraiz, periodista, analista político y productor ejecutivo de televisión y radio, la tercera mesa redonda del Health Goals Madrid, que ha contado con los directores de Recursos Humanos del Sermas, Miguel Ángel Rodríguez; del Gregorio Marañón, José Miguel Blanco Cisneros; y del Clínico San Carlos, Ana María Rodríguez. Durante casi una hora, estos han debatido sobre uno de los retos que más preocupa a los gerentes de los hospitales madrileños: a pesar de que Madrid es uno de los destinos favoritos de los sanitarios para trabajar, sufre también el déficit de facultativos que asola a toda España y a otras regiones de Europa. Por ello, los expertos han puesto encima de la mesa algunas medidas para gestionar el capital humano de los hospitales y poner así en el centro de la salud, no solo a los pacientes, sino también a los facultativos que les atienden.
La mesa ha comenzado abordando uno de los retos que más preocupa a los profesionales: la desmotivación de los facultativos sanitarios. En este aspecto, Blanco Cisneros ha afirmado que “solo el 23% de los trabajadores a nivel mundial están motivados”, por lo que se hace más importante que nunca abordar este problema.
“Una de las líneas estratégicas es la de cuidar a los profesionales y se puede lograr estabilizando a los facultativos a través de las convocatorias públicas", ha afirmado Miguel Ángel Rodríguez. Además, ha hecho hincapié en que ya se está trabajando en “tomar decisiones en materia organizativa y de gestión que motiven al personal y dejar que tengan más tiempo libre mediante la flexibilidad de horarios”.
Por su parte, Ana María Rodríguez ha señalado que la especialización podría ser, más que un problema, una oportunidad. “Las fórmulas que tenemos ahora para motivar son muy cerradas porque no podemos cambiar los salarios, por ejemplo”, ha dicho refiriéndose al estricto marco legislativo.
“Hablemos de la falta de facultativos. Esta es una profesión que tiene paro cero. Entonces, ¿por qué ha dejado de ser atractiva?”, ha preguntado Antonio Herraiz a los ponentes. Todos ellos han estado de acuerdo: este no es un problema que afecte solo a Madrid, si no que asciende al ámbito nacional e incluso europeo. Sin embargo, creen que podría aminorarse ampliando las plazas MIR, acelerando la homologación de profesionales extracomunitarios o creando una estrategia nacional de recursos humanos.
Además, Miguel Ángel Rodríguez ha explicado que ya se han tomado algunas medidas: “En atención primaria hemos aplicado decisiones para mejorar la conciliación como los turnos solapados. También hemos dado un incentivo a los centros de difícil cobertura para facultativos y pediatras y hemos ofertado a los residentes que elijan en grupo esos centros más alejados”.
Por su parte, Banco Cisneros ha puesto sobre la mesa uno de los debates que más controversia genera entre los expertos en Recursos Humanos en el sector de la salud: la permanencia de los facultativos mayores de 55 años en los turnos de guardia. “A veces pensamos que los seniors no quieren aprender a trabajar con las nuevas tecnologías, pero es un error. Ahora mismo, la esperanza de vida cada vez es mayor y algunos profesionales siguen perfectamente cualificados con 65 años para seguir trabajando, igual que los mayores de 55 para hacer las guardias”.
Por último, los expertos han comentado algunas propuestas viables ante la escasez de personal que, como ha explicado Ana María Rodríguez, es más notable en verano. “En la época estival no solamente no tenemos suficientes profesionales, sino que con estos contratos no hay dinero para realizar las suplencias”, comentaba.
En este sentido, Blanco Cisneros ha afirmado que “el tema del salario es importante, aunque según las últimas encuestas no es lo que más valoran los profesionales”. Por ello, propone ofrecer a los facultativos "algo más que el salario”, como cursos de formación que les puedan servir en su carrera profesional. Por su parte, Miguel Ángel Rodríguez ha optado por alargar el periodo de vacaciones. “Si lo implementamos, no todo el mundo se iría en el mismo mes y tendríamos más margen de maniobra”.