logo_medicina
Síguenos

Cómo reducir abdomen tras el embarazo

Existen distintos tipos de cirugías de abdominoplastia para extirpar el exceso de piel y grasa de la parte media y baja del abdomen y reforzar la musculatura de la pared abdominal después de dar a luz

Compartir
Cómo reducir abdomen tras el embarazo

Por Gema Puerto

4 de julio de 2023

Tras un embarazo, los músculos del abdomen, el tejido externo (formado por piel y grasa) y la fascia (tejido que mantiene las estructuras del sistema muscular, tendinoso, sanguíneo y de los órganos viscerales) quedan distendidos y flácidos. Con el objetivo de devolver a la normalidad todas estas zonas del cuerpo que se quedan sin fuerza y que no se han recuperado con hidratación, dieta, ejercicio físico o gimnasia hipopresiva durante el embarazo, existen distintos tipos de cirugías para conseguir un abdomen más plano, más firme y una cintura más estrecha.

Una de las intervenciones más habituales para mejorar esta parte del cuerpo es la abdominoplastia, un procedimiento quirúrgico mayor cuya finalidad es extirpar el exceso de piel y grasa de la parte media y baja del abdomen y reforzar la musculatura de la pared abdominal. Este procedimiento puede reducir drásticamente el aspecto abombado del abdomen (coloquialmente conocido como tripa). A cambio, deja una cicatriz permanente que, dependiendo de la extensión del problema original y de la cirugía requerida para corregirlo, puede ser más o menos larga.

Como explica el cirujano plástico y reparador, responsable de la unidad de cirugía plástica del Hospital Ruber Internacional, César Casado, existen varios métodos para reducir el abdomen: “Se pueden realizar extirpaciones de tejido de piel y grasa, tensado de los músculos abdominales y sus fascias o hacer una combinación de ambos tratamientos. En la abdominoplastia convencional se extirpa esa grasa y piel, se tensan los músculos y se modela el contorno con liposucción. Existen muchas variedades en función de si es circunferencial o no, si se precisa movilizar el ombligo o no, si hay qué hacer una cicatriz más o menos amplia, etc”.

La miniabdominoplastia, otra de las intervenciones habituales, es un tipo de abdominoplastia que no requiere recolocación del ombligo y la cicatriz que se produce se puede ocultar también en la zona de la ropa interior o bikini, ya que es más corta que en una abdominoplastia convencional.

El postoperatorio

Este tipo de procedimientos requieren anestesia raquídea o general y, en la mayoría de los casos, hospitalización de una noche, aunque hay excepciones. “Los resultados de la abdominoplastia son muy satisfactorios, las pacientes mejoran el contorno, la forma, el aspecto, y funcionalmente mejoran las molestias de espalda y el suelo pélvico (corrige signos de incontinencia urinaria, por ejemplo)”, explica el doctor Casado.

“Suelen precisar dos semanas de reposo relativo con baja laboral, dos semanas más de adecuación, en el que el abdomen comienza a movilizarse con normalidad, y un mes más antes de realizar ejercicio físico intenso.  No es doloroso en absoluto, duele menos que una cesárea, pero sí es molesto ya que precisa una faja un mes y no puede estirarse completamente la paciente durante las 2 primeras semanas”, añade el doctor Casado.

Este tipo de tratamientos no están cubiertos por la Seguridad Social, a excepción de las hernias o las eventraciones que puedan aparecer, y su coste va desde los 6.000 a los 10.000 euros.

 

 



Te puede interesar
forma- tumores-uterinos
Descubren la forma en la que crecen los tumores uterinos
entrevista-rafa-guerrero
Rafa Guerrero: "Todo niño necesita límites y normas, pero también ser atendido y protegido"
una-crema-ayuda-a-controlar-la-despigmentacion-de-la-piel-causada-por-los-efectos-del-vitiligo
Una crema ayuda a controlar la despigmentación de la piel causada por los efectos del vitíligo