Rotura de menisco: así son las nuevas cirugías menos invasivas

En deportes como fútbol, pádel o baloncesto, la rodilla es uno de los puntos críticos de lesión, ya que son frecuentes los saltos y movimientos de pivotaje que comprometen la articulación. Entre estas lesiones, una de las más frecuentes es la de menisco, como tejido fibrocartilaginoso que da soporte a la rodilla. Para cuando se producen, existen nuevas técnicas quirúrgicas menos agresivas y con mejores resultados que las intervenciones convencionales.

El doctor Antonio Morillo, experto en Traumatología y Cirugía Ortopédica en el Hospital Quirónsalud Clideba, explica el motivo de que estas lesiones sean tan frecuentes: “Los meniscos son elementos dinámicos que hacen que en cada movimiento la articulación se adapte, lo cual genera un estrés mecánico que puede llegar a producir daños tanto por degeneración como por traumatismos”. 

A nivel general, se puede diferenciar entre dos tipos de rotura: las agudas traumáticas y las degenerativas. Mientras que las primeras son frecuentes en deportistas jóvenes, las degenerativas están provocadas por el desgaste o la sobrecarga de la estructura y están normalmente asociadas a personas de mayor edad. En ambos casos, la sintomatología pasa por dolor, limitación al flexionar la rodilla y derrame articular. 

El primer paso, y “fundamental” para el diagnóstico, es la exploración física, según apunta el doctor Morillo. "Una vez realizada la exploración en consulta y con una sospecha diagnóstica fundamentada, el diagnóstico definitivo se realiza mediante resonancia magnética, que además de confirmarnos la lesión nos aportará información sobre el tipo de rotura para así planificar el mejor tratamiento para el paciente", señala el traumatólogo.

Tratamientos menos invasivos

El objetivo de todas las intervenciones y tratamientos de menisco siempre es preservar la mayor cantidad de tejido meniscal sano, aunque dependiendo del tipo de rotura y de paciente, se pueden realizar distintos tratamientos. 

Entre las opciones existentes, el tratamiento que reciba el paciente debe adaptarse a su perfil y tipo de lesión. El objetivo es “realizar cirugías para tratar de mantener el menisco en su totalidad en la medida que se pueda", explica el especialista de Quirónsalud Clideba. Este objetivo es posible gracias a los avances en las técnicas quirúrgicas, que ofrecen alternativas muy precisas, poco agresivas y con una recuperación menos dolorosa.

La meniscectomía tradicional es la intervención clásica de extracción parcial o total del menisco. Se trata de una operación agresiva para la articulación y con resultados poco satisfactorios a medio plazo pero afortunadamente, existen novedosas alternativas más eficientes. 

Una de esas cirugías sería la conocida como sutura meniscal artroscópica, que consiste en introducir un dispositivo que permite fijar el menisco a la cápsula articular sin necesidad de realizar una cirugía abierta. Una técnica que, en palabras del traumatólogo de Quirónsalud, "ofrece una alta tasa de éxito incluso en lesiones crónicas y roturas complejas, mejora la funcionalidad en pacientes con rodillas inestables y disminuye el riesgo de progresión de artrosis". También conlleva un mejor postoperatorio, con una reducción del dolor y un ingreso hospitalario que no supera las 12 horas.

Otra de las técnicas novedosas de medicina regenerativa es la infiltración ecoguiada de plasma rico en factores de crecimiento sobre la lesión meniscal para estimular su reparación, recomendada para lesiones agudas estables. Esta intervención ni siquiera requiere ingreso, siendo posible hacer vida normal “aproximadamente cuatro semanas después de la cirugía”, señala el especialista.

Aunque la medicina ha avanzado para ofrecer mejores alternativas ante estas lesiones, el doctor Morillo aconseja no descuidar la prevención y evitar las sobrecargas a través de la realización de actividad física moderada diaria, respetando los periodos de descanso muscular y fortalecer los grupos musculares mediante ejercicio anaeróbico.

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