Por Juan García
14 de febrero de 2025El borrador propuesto por el Ministerio de Sanidad para la reforma del Estatuto Marco ha provocado el rechazo en bloque del colectivo médico. Sindicatos y asociaciones han estallado frente a esta propuesta por considerar que atenta contra su valor como profesionales y sus derechos laborales. Unas reivindicaciones que comparten desde la Sociedad de Médicos de Atención Primaria (Semergen), cuyo presidente, el doctor José Polo, manifiesta su “rechazo total” a este borrador en conversación con Medicina Responsable.
“Compartimos el rechazo a un Estatuto Marco que quiere ser impuesto de forma unilateral”, afirma el doctor. La norma, en fase de negociación con los sindicatos, se ha encontrado con la oposición frontal de los médicos, quienes salieron ayer a la calle para exigir al Ministerio que atienda sus demandas. La reclasificación profesional, la regulación de las jornadas o el establecimiento de la dedicación exclusiva a la sanidad pública son los principales motivos que han despertado la indignación en la profesión.
El doctor Polo comparte la petición de crear un estatuto propio para estos facultativos que recoja sus condiciones “particulares”. Algo que, para el doctor, pasa en primer lugar por una reclasificación profesional que reconozca al médico como “profesional altamente cualificado, el de más alta responsabilidad. Debe tener una categoría superior o especial respecto al resto de trabajadores”. Su apoyo al estatuto propio para los médicos lo apoya como “una reivindicación histórica” del colectivo que, por “su formación y trabajo no puede ser equiparado a otras categorías profesionales”. La actual propuesta del Ministerio considera que “menoscaba el liderazgo clínico” de estos profesionales.
El doctor vaticina que con estas propuestas se va a desincentivar la retención de talento: “Si en AP está ya bastante mal la cosa, sería aún peor”. Una retención que, considera, se vería obstaculizada en caso de establecerse la dedicación exclusiva a la sanidad pública para jefes de servicio y los cinco primeros años tras finalizar la residencia. “En las condiciones actuales de un residente y las que se le ofrecen después con contratos basura, no veo lógico que se le quiera forzar cinco años, eso se llama esclavitud”, sostiene el doctor Polo.
“Lo lógico es que los médicos, tras finalizar la residencia, se vayan donde mejor les paguen, que bastantes penurias pasan durante la formación”, declara. Para el presidente de Semergen, una vez cumplidas las horas que le corresponden, no debería haber impedimento para que un profesional trabaje aparte “donde quiera”, y, en caso de ser así, reclama que se les pague “bien para que no tenga que buscarme la vida con sobresueldos”.
Por todo lo anterior, desde Semergen reclaman que “se escuche a los profesionales” y que “reúna a las sociedades científicas” para que aporten su punto de vista.