Por Medicina Responsable
12 de marzo de 2025El sindicato de enfermería SATSE ha afirmado que el problema de las agresiones a los sanitarios tiene su origen en los insuficientes recursos humanos y materiales del Sistema Nacional de Salud (SNS) y ha denunciado que las administraciones "no van a la raíz" de este problema "grave y recurrente".
La organización sindical ha recordado que esta "lamentable realidad" forma parte del día a día del personal sanitario, y que los últimos casos denunciados por SATSE, que han motivado protestas en Castilla y León, Cataluña, Andalucía o Galicia, son un "ejemplo más de que la insatisfacción" de las personas por el funcionamiento de la sanidad se plasma en actitudes violentas y ofensivas. "Si el presupuesto público destinado a Sanidad se recorta durante años y luego apenas sube, los problemas se multiplican y crece un ambiente propicio para la insatisfacción y el malestar entre pacientes y familiares que, cuando estalla, lo hace, lamentablemente, contra la persona que se tiene más cerca y a la que se tiende a responsabilizar de algo que, no solo no es culpa suya, sino que lo sufre también", ha apuntado el sindicato.
Entre las situaciones que elevan el malestar del paciente y sus familiares son, según el sindicato, las esperas prolongadas para ser atendidos, las estancias en pasillos y camillas, y la suspensión de intervenciones quirúrgicas programadas, todo ello fruto de una "precariedad persistente".
Esta situación se une a otras causas como la falta de reconocimiento de los profesionales como autoridad, el desconocimiento de las actividades y circuitos que deben llevar a cabo los distintos profesionales y el estado de cierta crispación social imperante, razón por la que SATSE ha aseverado que "la agresión nunca es la solución", insistiendo en la necesidad de disponer de centros sanitarios y sociosanitarios con suficientes profesionales para que cualquier persona vea satisfechas sus necesidades de atención y cuidados en un tiempo razonable.
Aunque SATSE ha reconocido que el problema "no es sencillo" y que requiere de diversas intervenciones en distintos ámbitos, ha reiterado que tanto el Gobierno como las consejerías de Sanidad, así como las empresas privadas, se limitan a implementar "medidas paliativas" y de atención a las víctimas que son "remiendos parciales e insuficientes".
Según el último informe del Ministerio de Sanidad, en 2024 se registraron un total de 16.558 agresiones a profesionales sanitarios, una "cifra récord". Del total de las agresiones, un 78% fueron dirigidas a mujeres y cerca del 27% tuvieron como víctima a una enfermera, tras lo que SATSE ha recordado que muchas de las agresiones no son finalmente denunciadas. "Tolerancia cero, siempre y ante cualquier situación, no debemos asumir las agresiones como inherentes a nuestro trabajo", ha señalado el sindicato, incidiendo en la importancia de que ningún acto violento quede invisibilizado.
El sindicato ha recordado que un 80% de las enfermeras ha asegurado haber sufrido uno o varios casos de agresiones verbales (amenazas, insultos, descalificaciones) o físicas (empujones, golpes, puñetazos), y ha insistido en que las enfermeras son un colectivo "especialmente afectado por este grave problema", principalmente por su "estrecha relación" con los pacientes y sus familiares, tanto en los centros sanitarios como en el domicilio del paciente.