
Por Clara Arrabal
15 de diciembre de 2025El pasado 4 de diciembre, un cirujano plástico con clínica propia en Alicante y actividad en distintas ciudades de España alquiló las instalaciones del hospital privado IMED Virgen de la Fuensanta, ubicado en Murcia, para realizar una cirugía mamaria. En el trascurso de la intervención y cuando la paciente estaba anestesiada, una enfermera y una auxiliar presentes en el quirófano y que sí pertenecían al personal del hospital observaron “un comportamiento anómalo” por parte del cirujano, por lo que sacaron su teléfono móvil y lo grabaron para denunciarlo a la dirección del centro, quien presentó el caso ante la Policía Nacional.
El sanitario, que fue detenido en Alicante y puesto a disposición de un juzgado de Molina de Segura (Murcia), se encuentra en prisión provisional, comunicada y sin fianza, y está siendo investigado como presunto autor de un delito de agresión sexual. Por su parte, las enfermeras presentes en el quirófano están citadas en calidad de testigos y el centro hospitalario está estudiando personarse en la causa, “ante la gravedad de lo ocurrido”, como ha anunciado en un comunicado. Además, la víctima ha presentado la correspondiente denuncia.
La víctima de la presunta agresión sexual no fue consciente en ningún momento de lo que pasaba, por lo que su declaración no podrá arrojar luz a lo sucedido. Sin embargo, los agentes de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) responsables del caso utilizaron los vídeos que grabaron las enfermeras allí presentes para detener al acusado el pasado día 9 de diciembre en Alicante. Después, la magistrada del Juzgado número 4 de Molina de Segura decretó su ingreso inmediato en prisión.
Según La Verdad, la víctima contactó con el cirujano plástico para someterse a una intervención de aumento de pecho y él le aconsejó realizarlo con grasa extraída de la pelvis, algo a lo que ella accedió. Tras la intervención y la posterior denuncia, un examen forense examinó la presencia de restos biológicos resultantes de la presunta violación.
En su comunicado oficial, el centro hospitalario ha anunciado que ha interpuesto una denuncia tras los hechos sucedidos, y ha mostrado su total apoyo a las profesionales que detectaron este comportamiento delictivo. Además, mantiene una colaboración absoluta con las autoridades y con la justicia para el esclarecimiento de los hechos. Está estudiando personarse en la causa e iniciar acciones legales contra el cirujano.
Además, hace hincapié en que el acusado no pertenece su plantilla. “El doctor detenido no pertenece al equipo médico de IMED Hospitales. Se trata de un cirujano plástico con clínica propia y actividad profesional en distintos centros de España", explica en el citado comunicado.
Ante los hechos ocurridos, el Colegio Oficial de Enfermería de la Región de Murcia ha expresado su “profunda preocupación y rechazo ante cualquier forma de violencia contra la mujer y, en particular, ante la violencia sexual ejercida en el ámbito sanitario”. Además, ha mostrado su empatía y apoyo a la paciente víctima y ha reconocido el grave impacto físico, emocional y psicológico.
Sobre las enfermeras presentes, ha indicado que actuaron con valentía, profesionalidad y responsabilidad, por lo que pondrá a su disposición asesoramiento jurídico y apoyo psicológico, “reafirmando su compromiso de acompañarlas y protegerlas ante cualquier posible consecuencia profesional o emocional derivada de su actuación”. Y recuerda: “Ser testigos de una situación de esta naturaleza supone también una experiencia potencialmente traumática, y el Colegio reconoce el impacto psicológico que puede derivarse de haber presenciado un acto de violencia, especialmente en el contexto asistencial”.